25 abril, 2024

Opinión

La palabra y el día de la madre

En estos tiempos, tiempos de la Revolución Ciudadana, en los que las palabras libertad, dignidad, derechos humanos, pueblo, justicia social y democracia, entre otras muchas, cada día se van vaciando de contenido, es preciso reflexionar sobre el pensamiento de ese gran escritor argentino Julio Cortázar, en un discurso sobre la palabra, expresó: “…pero la distorsión del lenguaje es todavía peor en nuestros días, cuando la sofisticación de los medios lo hace más eficaz y peligroso. Porque ahora franquea los últimos umbrales de la vida individual y, desde los canales de televisión o desde las ondas radiales, puede invadir y fascinar a quienes no siempre son capaces de reconocer sus verdaderas intenciones”.

Distorsiones

Distorsión etimológicamente significa “torsión o torcedura de algo”; generalmente se produce cuando se deforma el propósito o plan de algún negocio, servicio, prestación o idea, tratando de conseguir alguna utilidad ilegitima. Esta mala práctica está prohibida por las leyes, pero, se practica en el país. Pongamos dos ejemplos de estos hechos anómalos:

1.- La Televisión por Cable: En los Estados Unidos de América, estudios de marketing demostraron que una de las mayores quejas de los usuarios, también llamados televidentes, consistía en el reclamo o protesta por la gran cantidad de anuncios comerciales que se insertaban interrumpiendo reiteradamente la transmisión televisiva. Basados en esa realidad dirigentes de canales de televisión publicitan el servicio de “Televisión por Cable” o “Televisión Pagada”, con la que se podría disfrutar, según la intensa propaganda que se hizo, sin cortes comerciales, pagando una cómoda cuota económica que se abonaría mensualmente.

Siempre te esperaré…

“Nena no te pongas mal, sabes que esto cambiará, yo luché tanto tiempo por lograr lo que ahora tengo. Es muy grande la ciudad si no estás bien convencido, que quieres llegar bien alto aunque sea duro el camino…”

Escuché hace años esta canción por sugerencia de mi hija Lidia, cuando ella era una pequeña niña. Desde esa ocasión cada vez que la escucho, mínimo, un par de lágrimas no dudan en salir de mis ojos. En aquella ocasión me di cuenta que algún día mi hija se marcharía de mi lado. Tal como yo me fui un día del lado de mi mamá. La ley natural de la vida. Pero las partidas no son solo entre padres, madres e hijos. Parece que estamos destinados a un continuo despedir lo que queremos. Lo que causa dolor, dolor que debemos transformar en esperanza.

La Boda

Asistí hace pocos días a un matrimonio, en el que se leyó como es costumbre en estas ocasiones el pasaje bíblico de las Bodas de Canaán. Ya lo había escuchado un sinnúmero de veces, pero ahora la idea que llegó a mi fue distinta. Sin poder repetir con exactitud lo que el sacerdote dijo, remito algo parecido y escrito según mis palabras:

A los novios de las Bodas de Canaán se les acabó el vino; la fiesta entonces se iba a convertir en un fracaso y todo el pueblo iba a comentar sobre eso, contando con los invitados que seguramente harían las peores críticas sobre sus anfitriones. Pero, ¡Oh sorpresa! No contaban con ciertas amistades del novio y de la novia. Había entre sus invitados dos personas que harían de aquella situación algo que sería recordado por los siglos de los siglos: un milagro. Una sencilla Mujer invitada a la boda, quien parece tenía la costumbre de estar muy pendiente de todo, se da cuenta de que el vino se había terminado. Dice entonces a su Hijo, a estos dos se les acabó el vino, dales una mano, que los pobres están desesperados. El Hijo que no quería salir de su low profile (bajo perfil) le pide que no se meta en ese asunto, aún no es su hora de actuar. La verdad no sabemos qué es lo que estaba esperando o cuando sería el momento preciso en que se diera a conocer al mundo. En tal caso, tuvo que demostrar su identidad secreta porque aquella mujer como toda buena madre, no tomó en cuenta sus palabras y con sutil delicadeza ordenó a los empleados de aquella casa: ¡hagan lo que Él les indique! El obediente Hijo, se puso manos a la obra al darse cuenta que no podría ir contra la insistencia de su Madre, entonces hizo llenar las tinajas de agua y luego transformó el agua en vino. Con más que suficiente vino para esa noche, continuó la fiesta y con un detalle que jamás olvidarían los invitados; terminado el vino mediocre, los novios ofrecieron el mejor vino de la historia. Que se sepa, nunca jamás nadie ha probado un vino tan exquisito.

El Resentimiento

Hace tiempo, cuando escribía en el Diario El Telégrafo, antes de sergobiernista, exprese algo sobre lo que promueve el resentimiento, a propósito de una afirmación de Abdala Bucaram que decía “votar por Bucaram es como rayar el mercedes de un rico”, hacía alusión a esta metodología política de campaña de exacerbar el resentimiento, el que en mi concepto, actúa como motor de la lucha de clases, amén de los otros elementos propios de la época en la que nació la teoría marxista, que realmente será motivo de otro artículo porque este hecho hay que situarlo en el tiempo y en el espacio de cuando ocurrió, que ahí si tiene justificación, mas no en las condiciones actuales, de ello me da la razón la reciente resolución del Partido Comunista Cubano en su congreso que termino hace pocos días eligiendo al nada carismático y muy pragmático Raúl Castro como nuevo Secretario General del partido.

Según el diccionario Resentimiento es: acción de resentirse. Resentirse es empezar a flaquear a debilitarse o a tener sentimiento o enojo por algo. Ese es el sentimiento que prima en muchos ecuatorianos cuando se acercan a las urnas, cuando participan en política, buscan una venganza, un desquite, cobrarse una deuda, porque están enojados, disgustados. El lógico sentimiento que inunda al ser humano, al determinar la diferencia de formas de vida, crea precisamente, a partir de esa diferencia un sentimiento de disgusto, que se denomina resentimiento.

En el día mundial de la Libertad de Prensa

¡Periodistas del Ecuador y del mundo! Para que las fuerzas represoras sepan que solo callaremos, cuando nosotros lo decidamos. Porque dejar de escribir o de decir, es aceptar la derrota. Sigamos erguidos […]

El País dirá NO, las computadoras diran SÍ

Sin pretender ser adivino, ni mucho menos agorero de las desgracias, en mi artículo “Nuevo fraude en ciernes” de marzo 4 de 2011, manifesté que, una vez más nos tocaría ser espectadores indefensos de un tsunami de propaganda y verborrea por parte del economista. Me he quedado corto en la mencionada apreciación.

La propaganda gubernamental desplegada ha llegado a límites demenciales pues Correa, sus ministros y demás tontos útiles, tienen copado al país con ilegal propaganda proveniente de fondos públicos lo que constituye un atentado al erario público, que más temprano que tarde deberá ser castigado con todo el rigor de la ley, además de que el economista y los servidores públicos involucrados en estas acciones, deberán responder por usar el tiempo en labores a las que no están autorizados por el pueblo que mira absorto cómo sus impuestos están trabajando en función de un fraude electoral por lo que sus autores arriba mencionados, en su momento, tendrán que ser juzgados y condenados a devolver todos los dineros mal usados, al caer en el delito de peculado, y por consiguiente ir a parar con sus huesos a la cárcel, que es el lugar en donde deberán pasar por el tiempo que les sea asignado con estricto apego a la justicia, justicia de la que, hasta estos momentos, hacen tabla rasa al mofarse del pueblo aprovechándose de su proverbial ignorancia, porque, quizás, se imaginan que nunca les caerá el contundente brazo de la ley.

¿Conoce usted la undécima pregunta de la Consulta/Referéndum?

Muy corto el tiempo dado para la difusión y análisis de los contenidos de las preguntas presentadas para la convocatoria a Consulta/Referéndum popular.

Salvo un par de raras excepciones nadie ha podido desmenuzar el malévolo contenido de los temas a ser aprobados o negados y mucho menos hacer conocer los verdaderos alcances de los mismos.

De por sí, lo pretendido se tapa con una redacción de tal ambigüedad que sirve para todo y a la vez no sirve para nada bueno. Indiscutiblemente le proponen la única competencia a la famosa navaja suiza de cientos de usos, pero en este caso ellos son letales.

Porqué debo votar NO y mil veces NO

Tantas cosas pasan por mi cabeza actualmente, desde problemas personales familiares, hasta una infamante arremetida, incluso física, contra los que defendemos la postura contraria a este desgobierno, que sinceramente NO sé por dónde empezar, sin embargo, trataré de hacerlo de la manera más sencilla posible, incluyendo, sin pasionismo político, mis motivos por los cuales sobradamente consignaré mi votación negativa a todas y cada una de las preguntas de esta Referendo y Consulta Popular.

Para dar inicio, siento que lo que realmente se busca es simplemente una tarima política para nuevamente medir fuerzas con la oposición, grave error del señor Correa, porque esta vez estoy convencido que le saldrá el tiro por la culata, porque sus últimos exabruptos, incluidos los de sus acólitos, han sido la mejor campaña en su contra, y él ha visto como se desploma, unos porcentajes mentirosos a favor de sus designios, que sólo estaban soportados por una base, de no tener contendor de peso, porque no se los ha dejado participar en una buena lid electoral.

Ecuador: Una Democracia sin Demócratas.

Si pensábamos que lo habíamos visto todo en el Ecuador, pues resulta que no es así, ya que desde hace cuatro años tratamos de “erigir” una democracia que carece de demócratas que la puedan construir.

La Democracia no es un concepto fácil de explicar, pero tampoco es una forma de gobierno nueva en la sociedad. Ya hace 2.500 años los antiguos griegos la inventaron para involucrar a los ciudadanos en las decisiones de la sociedad. Desde Platón y Aristóteles, pasando por San Agustín y Santo Tomás, hasta llegar a Locke, Montesquieu, Rousseau, y todos los grandes pensadores filosóficos y políticos de la historia, que han aportado con sus ideas y razonamientos los argumentos para construir lo que hasta hoy en día es el mejor sistema político de convivencia de la humanidad.

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