El viejo sistema de dividir para gobernar atribuido a la Partidocracia, como sistema del mal, tan criticada y combatida por el Gobierno Central, hoy es la principal arma esgrimida en forma permanente por el Sr. Presidente, al usar despectivos epítetos para referirse a determinados grupos sociales, buscando alterar la paciencia de unos para alegrar la irresponsable actitud de otros, buscando así cimentar en ese corrupto sistema su popularidad dentro de un marco de confusiones y zozobras que confunden y desequilibran el razonamiento de los ingenuos, para en su confusión, gobernar sin ningún control y análisis que genere la fiscalización de los actos de su Gobierno, sin evaluar tampoco los profundos resentimientos que se generan, dejando huellas que pueden ocasionar conflictos con difíciles perspectivas sin beneficio para ninguna de las partes involucradas impositivamente por el Econ. Rafael Correa.