Los acontecimientos que marcaron el inicio del año 2015 y lo continúan haciendo, están delineando lo que se nos avecina en este año y los venideros.
Tenemos así: terrorismo, crisis económica, financiera, crisis política y cambios de gobiernos, inestabilidad y cambios de precios y producción en el mercado petrolero con consecuencias negativa para unos países y beneficios para otros, enfermedades y epidemias y revueltas sociales por reacciones y agotamiento de los ciudadanos en algunos países, así como conflictos armados focalizados que podrían ampliarse y complicarse a nivel mundial. Grandes cambios y avances tecnológicos y su influencia en nuestras sociedades, poblaciones y naciones.
Muchos dirán todos los años y tiempos han pasado por estos procesos, lo cual es verdad, pero en cada época y/o año hubo variables importantes.
Analicemos algunas y maticemos las circunstancias actuales.
La globalización y las tecnologías nos mantienen viviendo el día a día en tiempo real todo lo que sucede en nuestros países y en el mundo, esto en todos los campos.
Las redes sociales multiplican con alta velocidad la información incluyendo sus individuales y propios pensamientos lo que influye de muchas maneras en los procesos y posibles resultados.
Las recientes y masivas migraciones han cambiado los tejidos sociales en muchos países y esto influye en los procesos y acontecimientos de cada país.
La interdependencia económica está más marcada y fortalecida a nivel mundial y, por ejemplo la menor capacidad de compra por la baja de los precios petroleros, baja la capacidad de venta de muchos países aunque tengan reducción de precios de sus combustibles.
La guerra de las monedas y sus fluctuaciones tienen acciones y reacciones inmediatas generando resultados positivos y negativos, pero desde la lectura del simple ciudadano, actor pasivo de los acontecimientos, mucha incertidumbre y muchos temores.
Podría seguir reflexionando sobre cada asunto, incluido el preguntarnos si el liderazgo mundial está a la altura y con la talla y capacidad de dar la respuesta adecuada y oportuna ante cambios tan acelerados; muchos imprevisibles y algunos que requieren acuerdos y consensos entre varios países, regiones y poderes, y debemos incluir religiones.
Es un mundo multipolar, multidependiente, multicultural y por ello múltiple en la diversidad de problemas y soluciones que se mueve en todos los campos con gran velocidad.
Para mí, el 2015 es el inicio de grandes, grandes desafíos, muchas incertidumbres y miedos, que se reflejarán en la ansiedad con que muchos ciudadanos deberán llevar sus vidas adelante, y en el que muchas certezas se tornarán en muchas dudas.
En otros términos es el inicio de una vida acelerada, intensa y cambiante.
¿Estás preparado para los veloces cambios, respuestas y reacciones oportunas?
Buen artículo. Nadie está listo para ningún desafío. Habrá que adaptarse, buscar consensos, y combatir por las armas si es necesario para extirpar de raíz los grupúsculos criminales.