La semana que estamos por terminar ha sido de mucho movimiento político debido a las 10 preguntas planteadas por el Presidente Correa así como por la expedición del Decreto 623 que reestructura las labores de la Policía Nacional.
Las preguntas a someterse a consideración del pueblo tienen cierto carácter de tendenciosas, buscando en forma engañosa un pronunciamiento por el SI. Todas las relacionadas con la seguridad ciudadana obligan a un pronunciamiento positivo, buscando que la inseguridad que reina en el país por lo menos disminuya. Así mismo la relacionada con el combate a la corrupción y al enriquecimiento privado, rebusca mañosamente el SI pese a que es algo ya contemplado en Leyes vigentes-especiales sobre el tema.
La limitación a la actividad bancaria y a los Medios de Comunicación, es una aspiración del Régimen que tiende a limitar y controlar los sectores, pudiendo convertirse en inconvenientes para el desarrollo del país, ya que la amenaza restaría interés a la inversión. Los toros y gallos dejaran de ser espectáculos de cultura popular, aduciendo violencia animal, lastima por nuestro pueblo.
Pero tal vez lo mas grave es el proceso relacionado con la elección del Consejo de la Judicatura y la Reorganización total de la Función Judicial, que terminará mas politizada que antes y siendo aun mucho mas lenta que lo programado en la Nueva Constitución.
En todo caso la última palabra la tiene la Corte Constitucional que tendrá la oportunidad de demostrar a los ecuatorianos si son o no un Organismo dependiente del Ejecutivo, o proceden por lo menos a modificar el planteamiento de las preguntas.
La Restructuración visceralmente de la Policía, ha creado un gran malestar e intranquilidad en la tropa y oficiales, ya de por si lastimada con el S-11. La pérdida de Autonomía financiera y administrativa, busca controlar lo más delicado de la Institución, los salarios. Veremos cuales serán sus consecuencias en el corto plazo.
