En verdad preocupa ver la forma en que el Gobierno actúa en relación con el derecho a la libertad de expresión. Los mensajes que han llenado nuestras mentes durante el campeonato mundial han sido constantes y persistentes en contra de los medios de comunicación.
Un verdadero lavado de cerebro. Indicar que la prensa fomenta la violencia es una aseveración arriesgada. Es cierto que hay diarios y canales centrados en las noticias crudas y violentas, con fotos de asesinados y tomas de crónica roja, pero justamente, uno de los canales especializados en estas noticias, el canal de la sangre, es actualmente un canal estatal, y el Gobierno no ha hecho nada para cambiar esta política, estando en sus manos el hacerlo.
Tildar de ladrones, o de ganar dinero en forma ilícita, o de mentir, es una aseveración que podría exigir una acción penal en contra del Gobierno. No se puede atentar contra la honra de las personas y quien debe dar el ejemplo de respeto es el Gobierno.
La mentira, aunque sea repetida un millón de veces, no se convierte en verdad, pero sí puede ser creída por gente que no tiene acceso a otro tipo de información. De aquí el peligro de una ley mordaza, que anule toda información que no sea la gubernamental.
Es la obligación de todos los ciudadanos defender la libertad de prensa, todo tipo de prensa, ya sea visual (TV), oral (radio), escrita (diarios), o digital. Se debe exigir la seriedad en la noticia, pero respetando la privacidad y sobre todo, impidiendo las aseveraciones que difaman sin pruebas a las personas, ya sea del Gobierno o de la oposición.
La ley debe ser igual para todos. Ya hemos visto recular al Gobierno en el juicio contra un periodista, al darse cuenta de lo absurdo de su victoria. No sea que ahora pongan una ley injusta y peligrosa para la democracia y que luego se vuelva la tortilla y que les toque a los que gobiernan hoy, sufrir por una ley instalada por ellos. Las leyes deben ser puestas para el bien de todos los ecuatorianos, no sólo del grupo que está en el poder.
José Fernando: Dice un refrán popular, el que no la debe no la teme. Entonces, por qué tienen tanto pánico a la prensa ecuatoriana, qué se esconde atrás de la revolución, no hay sinceridad en ningún acto gubernamental. Pero el pueblo ecuatoriano no es tonto, de todo se da cuenta por más de que hayan tratado de disfrazar el mundial con publicidad dizque revolucionaria.
Mayra
estimado Jose
usted indica que la ley debe ser para todos, de acuerdo estamos entonces, la ley dice que las jefaturas medicas deben ser ocupadas por concurso, si la ley es igual para todos entonces la junta de beneficencia debe cumplir, con la convocatoria a concursos, esto a mas de pagar a los medicos el retroactivo que les adeuda y pagar los sueldos que la ley manda, ojala la prensa hiciera una investigacion al respecto y la publicara, la prensa y los periodistas nunca publican estas cosas