26 abril, 2024

Del fanatismo al vandalismo

El fútbol es, sin lugar a duda, el deporte de masas más importantes del mundo. Su audiencia, en partidos del Mundial, Regionales o Continentales, supera los millones de espectadores. Sus escenarios deportivos se repletan (entre 50.000 a 90.000), no caben uno más.

También el fútbol mueve millones de dólares en ingresos para sus Organizaciones Directivas, para los equipos y para todos los actores que intervienen en ellos, desde los Preparadores Técnicos, los Jugadores, los Gremios de Árbitros, los Premios y las Apuestas.

Tal es el movimiento económico, que se presta para la corrupción. Hay dirigentes de la FIFA encarcelados, otros investigados penalmente. Las Federaciones Nacionales, no se escapan y algunos dirigentes, nacionales y regionales, están en prisión o en investigación.

Boca y River, más allá de disputar la final de la “Copa Libertadores”, cosa inusual, representan en la actualidad, el mejor futbol de Sudamerica y de la América misma. La hinchada de estos dos equipos, ha desbordado los límites de lo racional y han pasado del fanatismo al vandalismo.

Son los nuevos Hooligans Ingleses de Sudamérica. En la actualidad ambas hinchadas son una vergüenza nacional e internacional.

El 1ero., fue un empate, veremos cuál será el resultado final. Yo le apuesto al empate y a la definición con penales.

Veamos que sucede, lo veré con tranquilidad en casa, o en otro lugar seguro.

Artículos relacionados

En defensa de nuestra historia II

De toda esta marea de comentarios, unos hechos con el hígado, otros hechos con el cerebro; y otros (los menos), hechos con los pies, debemos sacar una lección que nos ayude a progresar como sociedad; que nos empuje a investigar más sobre nuestra historia de tal modo que, con sabiduría, ecuanimidad y generosidad de espíritu podamos reconocer cuando nos equivocamos en aras de que triunfe siempre la verdad y recuperar así el valor de nuestra herencia histórica.

Veo con preocupación y tristeza que muy pocos se toman la molestia de averiguar en que bases documentales nos respaldamos para aseverar todo lo que aseveramos en esta obra y reflexiono sobre el valor de este foro que, de ser útil, debería llevarnos a conclusiones que permitan consolidar el valor de las historias seccionales sin que esto escamotee el protagonismo que, en cada uno de los eventos importantes de nuestro pasado, tuvieran cada una de ellas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

×