2 mayo, 2024

Silbatina en "Mi bemol mayor"

Mientras se realizan los “sui generis” conteos para conocer los resultados de las elecciones del domingo próximo pasado, haremos un paréntesis en el sainete de democracia en que vivimos para comentar sucintamente acerca del memorable abucheo que produjeron las insensatas palabras del novel gobernador de nuestra vilmente fragmentada provincia en la noche de la reinauguración del teatro del Centro Cívico.

Es de dominio público que a la revolución ciudadana la tenemos metida hasta en nuestras más horribles pesadillas, por lo que no resultó nada extraño que al ingresar a la sala de conciertos nos encontráramos con 2 inapropiadas “gigantografías” que mencionaban, al estilo nazi, logros del gobierno – Heil Hitler – y que hacían presentir lo que vendría más adelante.

Renuncie Ciudadano Presidente

Han transcurrido 2 años desde el momento en que Rafael Correa Delgado asumió la presidencia del Ecuador, y a pesar de no haber jurado respetar y hacer respetar la constitución en vigencia -como era su obligación- estaba y está en el deber irrenunciable de hacerlo, más lamentablemente hemos visto que nada de esto ha sucedido.

En la vida hay una verdad incontrovertible, esto es que nadie es del todo bueno ni nadie es del todo malo, pero en lo actuado por el economista en todo lo que lleva de su mandato, lo malo ha superado en demasía a lo bueno, a tal extremo que si ponemos en la balanza las 2 posiciones, la diferencia sería tal que parecería que nada bueno se ha hecho en este gobierno.

Dicebamus Hestemia Die…

«Como decíamos ayer»

Frase con la que Fray Luis de León reinició sus clases en la Universidad de Salamanca, luego de haber pasado casi 5 años (marzo 27 de 1572-diciembre 7 de 1576) en cárceles de la Inquisición.

Al retornar no hizo referencia a su ausencia ni a las causas de ella, más bien profirió la frase con que solía empezar sus clases, y que es la que le pone título a este artículo …yo no fui prisionero de la Inquisición, ni cosa que se le parezca, más sí mencionaré que mi ausencia se debió a varias razones, las más de los cuales agradables; pero hubo una que, a mi esposa y a mí, nos vistió de magia – de la más linda de las magias – y consistió en la llegada, desde Francia, de mis dos hijas, mi hijo, mis dos nietecillos, y mis dos yernos, quienes junto a mi tercera hija y su esposo, que viven en Guayaquil, nos dieron la más grande alegría en el mes de la navidad y de final de año.

Para hablar de guayaquil, primero debes lavarte la boca

Hugo Chávez una vez más se inmiscuye en los asuntos de otros estados, en esta ocasión lo hace con el Ecuador, particularmente con Guayaquil cuando menciona que en esta ciudad hay grupos separatistas que quieren dividir el país, omitiendo intencionalmente que lo Guayaquil necesita y reclama es la autonomía ganada por abrumadora mayoría en votación popular.

Qué tal ironía; en este Ecuador el único separatista es el presidente Correa quién, como discípulo de Chávez repite, hasta el cansancio, frases llamando a la desunión entre ecuatorianos, poniendo a serranos contra costeños, pobres contra ricos, cristianos contra laicos, y, por si fuera poco, enarbolar a la deidad “Pacha mama”, etc.

Signos de Puntuación

Por error ocurrido en mi oficina, se envió para su publicación el artículo “CONSTITUCIÓN SIN SIGNOS” que había llegado a mi correo electrónico, por lo que no es de mi autoría.

El error se dio en razón de que yo había escrito, y estaba listo para su envío, un artículo titulado “SIGNOS DE PUNTUACIÓN” que coincidentemente tiene los mismos argumentos que el artículo primeramente mencionado, esto es, que me refería a la negativa actuación de Fernando Cordero ante los hechos cometidos entre gallos y media noche, por aquellos que metieron las uñas en los textos constitucionales aprobados en Montecristi, y que ahora el “corcho” pretende minimizarlos para lo cual se ha investido de un carapacho tan duro que podría ser la envidia del mismísimo “solitario George”.

Panem et circenses II

Si el economista Correa ha pasado todo el tiempo que lleva de su gobierno dándonos “CIRCO” sin “PAN”, los asambleístas de Alianza PAIS y sus adláteres no podían ser menos, y nos hicieron testigos de otro “CIRCO” grotesco en el que primaron las incongruencias, muchas de las cuales fueron producto de la improvisación, del desconocimiento de lo que estaba tratándose, de la casi nula preparación académica de una mayoría de asambleístas, pero sobre todo de la necesidad de “quemar tiempo” mientras llegaban los artículos desde Carondelet…

Panem et circenses (I)

Locución latina que se traduce por PAN Y CIRCO, la que se remonta al siglo primero y es atribuida al poeta romano Juvenal. Esta locución se refiere al hecho de que los emperadores romanos acostumbraban obsequiar trigo y entradas a los circos para distraer de la política a la plebe.

Actualmente se la utiliza para describir las acciones poco ortodoxas de los gobiernos ineptos con la finalidad de ocultar hechos o acciones discutibles y así mantener tranquilo al pueblo desviando su mirada de las acciones que, por su incapacidad para gobernar, no le es conveniente que sean de conocimiento público.

En nuestro país no estamos en mejores condiciones que la plebe romana pues el economista nos da solamente “CIRCO”, más no el “PAN” cuya elaboración ha sido demagógicamente manejada. La percepción de la ciudadanía es que lo que se ha repartido en 15 meses de gobierno es mendicidad al haberse incrementado el bono de la pobreza.

El “CIRCO” elevado a categoría de falacia monumental se produjo en días pasados, al confiscar más de un centenar de empresas supuestamente de propiedad del grupo Isaías –entre las que se encuentran 3 canales de televisión- hecho que tiene todos los visos de ilegalidad, y que se lo quiere hacer aparecer como un acto de justicia para con los acreedores de Filanbanco…

Yo votaré NO

POR TODAS LAS COSAS MALAS QUE HAN HECHO Y HACEN EL PRESIDENTE Y LA ASAMBLEA,

POR TODAS LAS COSAS BUENAS QUE NO HAN HECHO Y NO HACEN EL PRESIDENTE Y LA ASAMBLEA,

De diccionarios, silogismos y baratillos

El “DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA” de la REAL ACADEMIA ESPAÑOLA, en su vigésima segunda edición (año 2001), define al vocablo “mentiroso” de la siguiente manera;

Mentiroso, sa. adj. Que tiene costumbre de mentir.

Desde la campaña para la presidencia de la república, y hasta nuestros días, el economista Correa mantiene la costumbre de decirle al país cosas que no son ciertas: Prometió y no cumplió con la generación de empleos; construcción de viviendas, escuelas y hospitales; no pagos a la deuda externa; unir a la familia ecuatoriana; obras para beneficio ciudadano que no pasaron de la “colocación de la primera piedra”; bajar el IVA; no hay aclaración alguna acerca de las graves acusaciones en el caso FARC; rehabilitación de carreteras, etc. En fin, la cadena de engaños es tan larga que a los ecuatorianos ya nada nos sorprende y, tal como van las cosas, estamos condenados a sufrirla hasta que termine su periodo…

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