5 octubre, 2024

Más de 4000 años de vigencia

El diccionario de la RAE sostiene que el Castellano contiene 88.000 palabras. Para otros como Aspons, Veracruz, página web CiberArponFiles, manifiesta que son mucho más, cerca de 300.000 entre las arcaicas o inusuales sin considerar las originadas en las regiones del mundo hispano-americano. Se presume que apenas se utilizan 10.000 como media en la práctica con vocabulario fluido, aunque los expertos han concluido que dicho promedio sería más reducido, volviéndose el vocabulario pasivo para un hispano 1.250 y su activo, 750 palabras. 

Las redes sociales publicaron que el símbolo de la carita feliz o smiley face, data de 1.700 a.C., hallado cerca de la frontera de Turquía y Siria en una vasija de cerámica de casi 4.000 años a.C., en cuya superficie se observan los dos puntos y una línea curva débilmente dibujada, antecedente prehistórico y que hoy es tan popular para, precisamente, expresar estados de ánimo, facilitar la comunicación digital y expresión de emociones  mediante los emojis (1995) de origen japonés, al momento alcanzan según Unicode, un total de 3.019 emojis y hasta tienen su Día Mundial  “las bonitas caritas”.

En cuanto a su “cuasi hermano”, los emoticones o íconos emocionales (1982), de nacimiento inglés, son signos de puntuación, letras y números utilizados para crear íconos pictóricos igualmente, de emoción o sentimiento, según la Enciclopedia Británica. 

A través de las redes sociales se puede comprobar que los muy utilizados, y curioso, son tan longevos, ejemplo, la primera carita feliz o smiley face acorde al descubrimiento arqueológico mencionado, posiblemente, fue renovado por el artista Harvey Ball, Massachusetts, en 1963.

Colofón de esta breve historia tomando en cuenta tanto los emojis como los emoticones son parte del lenguaje comunicacional entre “seres humanos” especialmente, en las redes digitales, nos lleva a razonar que “no hay nada nuevo bajo el sol”. Se necesitaron más de 4.000 años para poner en vigencia aquel lenguaje que nuestros antepasados por falta de palabras o términos se vieron obligados a utilizar, hoy nos sobran palabras; sin embargo, los emoticones o emojis son empleados y mucho. ¿Hemos actualizado la prehistoria o nos encaminamos a ella cumpliéndose lo de corsi e ricorsi una vez más? 

Posiblemente cada persona tiene su respuesta, dedicando la presente, de manera especial, a una de nuestras mejores historiadoras muy simpatizante de estos emojis cuyos orígenes son hasta prehistóricos.

Actualizada la publicación de 3 de enero de 2022.


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