26 abril, 2024

El avión presidencial.

Muchas controversias han estado en discusión sobre el uso de los aviones presidenciales, pero da pena ver cómo quieren mezclar la chicha con la limonada.

Los negociados y el abuso durante la década y media (sobre todo los primeros 10 años de correato), son completamente diferentes a lo que ocurre actualmente. Una cosa es usar los aviones para procesos delictivos, que deberían ser penados por la ley, intentando lograr impunidad con ese proceso, no dando información obligatoria e intentando ocultar información, y otra, completamente diferente es el uso para el traslado de las autoridades presidenciales a diversos destinos.

Por decretos mal escritos, se pretende decir que se ha hecho mal al trasladar al presidente y a su esposa a Miami para su operación. Si bien no es un viaje oficial, es el traslado limpio del Presiente a otro país, y está completamente justificado. ¡Tiene muy claras las indicaciones de quien viaja y para qué!

En los viajes que sí deben ser cuestionados, no existe indicación ni siquiera de quien viaja, peor para qué, y los destinos son paraísos fiscales y creo que hay algunos con destino desconocido.

El viaje actual del presidente tiene un justificativo claro y justo. Los viajes anteriores eran, a todas luces, delictivos.

No tratemos de mezclar la chicha con la limonada.

Artículos relacionados

Grave error

Nuestra Constitución manifiesta “que ninguna persona puede ser privada de su libertad por deudas, costas, multas, tributos, ni otras obligaciones, excepto el caso de pensiones alimenticias”; y, cualquier cambio al texto Constitucional debe […]

Expolibro 2010

Estuve en la Expolibro 2010, cuatro días de los 10 que duró.

No podría faltar a una feria internacional, gestada aquí en Guayaquil, desarrollada ya por cinco años y que ha sentado hitos literarios del País hacia el mundo.

Asistí-como visitante y participante, y de todas salí satisfecha y feliz.

Esto de estar entre libros y miles y miles de gente de mi Ciudad recorriendo los stands, “manoseando” a los autores en sus páginas en sus portadas, o haciendo buscar obras de autores, en “la pantalla” de un monitor, etc., no es de
todos los días.

Hay que reconocer la valía de un evento de esta clase. Qué orgullo sentí cuando afuera del País, alguien me abordó diciendo “Estuve en la feria internacional del Libro del Ecuador, en Guayaquil…”

1 comentario

  1. En la actualidad la crítica malsana sobre el uso de los aviones presidenciales, desnuda de cuerpo entero el cinismo de los delincuentes del SSXXI.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

×