“Un político empieza a ser estadista cuando piensa en las próximas generaciones, no en los próximas elecciones”: WINSTON CHURCHILL.
Escuché íntegramente, la conferencia de prensa convocada por nuestra NOVEL ALCALDESA. Parecía que hablaba a nombre de las “come caca”.
Más, también parece que el alzheimer, ha penetrado fuertemente en los dirigentes del correísmo, que les ha afectado la memoria, de todo el desvando de la “década”: perdida y desperdiciada. Qué horror!!!
Ex Ministros de Finanzas como el Ec. Pozo, las justificaron, (las medidas), como lo que había que hacer, para iniciar el despegue económico del país.
Columnista de este Diario (El Universo), como el Sr. Walter Spurrier, consideraron que era preferible, “reducir los subsidios a la gasolina, que subir los impuestos”.
Adoptar en el Perú, la total liberación del costo de la gasolina, supone para varios entendidos en economía pública, el desarrollo de los anteriores 20 años, con un crecimiento del 10% anual.
Mantener el subsidio a la gasolina, solo favorecía a las mafias de contrabandista para favorecer a los países fronterizos del Ecuador: Colombia y Perú.
En el Perú, un litro de gasolina, cuesta lo que en el Ecuador, un galón. Según cálculos, estábamos subsidiando a nuestros vecinos fronterizos. Sin embargo, ellos, sí perjudican nuestra economía, devaluando sus monedas. (Son los “hermanos” del Ecuador, “hermandad”, en la que nunca he creído).
Con valentía lo reconocieron el Presidente Moreno y su Ministro de Defensa. (Pero, así como es de valientes reconocerlo, también es lamentable, admitirlo, que tal contrabando se de, en nuestras fronteras).
Contrabando que, generalmente, se realiza en las noches y en tanqueros, pues los “guardias fronterizos”, también tienen derecho a “dormir” y por supuesto profundamente: mientras más pesado es el sueño, más rápido pasan los tanqueros (???…).
Alinearse con los/as “come caca”, fue un grave error de nuestra Alcaldesa. “Come cacas”, que llegaron a la audacia de “exigirle” la renuncia al Presidente Moreno, y “exigirle”:” a llamar a nuevas y anticipadas elecciones”. Qué descaradas. “Discípulas de Correa y de Maduro”, como bien las calificó el Presidente Moreno.
Además de “aplaudir”, dentro de la caótica situación del país, creada, gracias a nuestros “patriotas” taxistas y transportistas interprovinciales que intentaron imponer el caos en el País.
Les recuerdo, que, como gremios, contribuyen en el Ecuador, a causar más muertos y heridos que el que nos causa a diario la delincuencia. Delincuencia que aprovechó la oportunidad para dedicarse al saqueo en la ciudad de Guayaquil, que gracias a la firme postura presidencial, de nuestro Ministro de Defensa y de nuestra Ministra de Gobierno, se impidió.
Que las/os “cabecillas”, se mantengan presos y sean juzgados por las autoridades competentes, con el máximo rigor de la Ley, por haber violentado la seguridad ciudadana en el país, haber perjudicado al país en millones de dólares y haber realizado estas acciones desestabilizadoras, durante un “Estado de Excepción”, por todos conocidos.
Duro, con ellos, señora Fiscal y señores Fiscales, duro con ellos, señores Gobernadores e Intendentes de Policía.
Soluciones, al tema de alza que podría afectar a la clase más pobre del país, se la ha compensado con un aumento de $15.00 en el Bono de Desarrollo. Igualmente se podría compensar al Comercio lícito importador y al Industrial, importador y exportador reduciendo y/o eliminando de ser necesario, los aranceles. Solución que inteligentemente fue sugerida por el Ab. Jaime Nebot, en una entrevista radial que escuche, el miércoles pasado, muy temprano.
Que en las fiestas de Octubre, que en las vacaciones novembrinas y en las de Navidad, las familias ecuatorianas, desistan de viajar al exterior para sus compras -solo los realicen por causas necesarias- y gasten su dinero en el Ecuador, para compensar a la Industria, al Comercio y a los Artesanos. para compensarlos, en sus pérdidas ocasionadas por los disturbios de los días pasados.
Sería un mínimo sacrificio, de un trimestre.
Lo demas vendra por añadidura. .
