29 abril, 2024

Por la Unidad Educativa Bilingüe Steiner Internacional

¡Basta ya!  Del acoso del que están siendo víctimas, algunos colegios de Guayaquil, acusados como autores de actos degradantes de la ética institucional educativa, en el rendimiento de los exámenes INEVAL, organizados y controlados por el Ministerio de Educación en sus secciones respectivas.

Que “Solo son cuatro o diez colegios, más o menos” dicen –El número no importa, porque sea uno o cien, son parte irrefutable del gremio ministerial de educación pública y por tanto, éste tiene el deber de defender su integridad; no solo como mentalizador y controlador del rendimiento de dichos exámenes, sino también de los alumnos-entes, respetables- por los que yo, como Rectora de la Unidad Educativa Bilingüe Steiner Internacional garantizo plenamente, el rendimiento de dichas pruebas ejercidas dentro de una planificación minuciosa y de control oficial, más los entes del Plantel: Vice Rectora académica y docentes regidos por los cánones de ética y moral a expectativas de cualquier intento de dolo cibernético…

Incluso, la obligación de los alumnos a depositar, antes de las pruebas, todo elemento de transmisión (teléfonos, relojes, etc.) A más de la concienciación de normas éticas y morales, que son parte de la educación del Plantel.

Por lo que, como Rectora de este Colegio del que se señala, a muy buenos alumnos para repetir los exámenes en otra fecha, entre ellos una Portaestandarte del Plantel.

Enfáticamente, solicito a las autoridades educativas, dejar insubsistente dicha disposición.  Al tiempo que me uno a los otros Colegios que se sienten agraviados, para que se respete su integridad y por su bien, se hagan las investigaciones del caso, dentro de los cánones de derechos humanos y las normativas legales.

“Por la paz del mundo”

 

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Por este motivo, los productos en general, tienen una fecha de fabricación y una fecha de expiración, tal como tienen todas las cosas que deben durar un tiempo nomás y no eternamente.

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Soy de los que no podría vivir sin retos, es decir sin estímulos que me llamen directa o indirectamente a alcanzarlos. Mi ámbito preferido es la educación, la administración educativa y últimamente he desarrollado mis espacios hacia el desarrollo de mejoras organizacionales en diferentes instituciones que me honran con su confianza. La responsabilidad para con otros es constantemente incrementada y el “alimento” motivacional es el cumplimiento con un deber moral claramente especificado en la Misión de vida. Pero… ¿cómo puede haber gente que se motiva por los retos propuestos y otros que ni siquiera se los plantean?. ¿Qué se siente cuando se logran los objetivos y se plantean otros?. ¿Cómo funcionan las estrategias y las tácticas para el logro de los objetivos?. Intentaré razonar sobre el tema en cuestión en los siguientes párrafos…

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