7 diciembre, 2024

No a la violencia a la mujer

Hoy 25 de noviembre se celebra el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Afirma la ONU, con convicción, que la violencia contra el sexo femenino sigue siendo una pandemia global y que más de un 70 % de las mujeres sufren violencia en su vida. En razón de ello, su secretario general lanzó la campaña Únete, para poner fin a la violencia contra las mujeres, proclamando el 25 de cada mes como Día Naranja, pues no solo un día al año existe la violencia, sino todos los meses.

Según las estadísticas que maneja dicho organismo, el costo de la violencia doméstica en Estados Unidos supera los 5.800 millones de dólares anuales, de los que $ 4.100 millones corresponden a servicios médicos y sanitarios.

Las cifras en Ecuador, proporcionalmente, deben ser mucho más altas, y el Estado debe cubrir los gastos de la violencia, teniendo en consideración que una de cada tres mujeres ha soportado violencia psicológica, física o sexual, principalmente por un compañero sentimental.

ONU Mujeres este año busca concienciar a la población mundial, para lo cual propone 16 días de activismo contra la violencia de género, que finalizan el 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos.

En Guayaquil, muchas organizaciones, a propósito del mes de la no violencia a la mujer, empezaron su activismo a través de la vinculación con la sociedad. Por ejemplo, la carrera de Psicología de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil ha organizado para mañana, 26 de noviembre, a las 18:00, en conjunto con el Departamento de Violencia Familiar de la Zona 8 de la Policía Nacional, un taller gratuito sobre violencia de género, con la participación de la tenienta Diana Galarza, jefa del Departamento de Violencia Intrafamiliar. La iniciativa busca que la sociedad civil, las organizaciones, fundaciones y el sector privado se unan para luchar contra esta pandemia mundial, desde una profundización epistémica, para a través de estos saberes apoyar en la erradicación y prevención de dicha lacra social.

Recordemos que la violencia contra la mujer es una violación de los derechos humanos y que según nuestra propia Constitución merece y exige sanciones. ¡No callemos, hay que hablar y denunciar!

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