Hacer Caminos
Los clásicos versos de Antonio Machado siguen inspirando, no solo a cantantes sino a los peregrinos de la vida, aquellos que vamos haciendo de nuestro andar un proyecto de vida que recorrer: “Caminante, son tus huellas/ el camino, y nada más/ caminante, no hay camino, y al volver la vista atrás/ se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar/ Caminante, no hay camino/ sino estelas en la mar/. Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar/ pasar haciendo caminos,/ caminos sobre la mar.”
Cuando un joven va creciendo, sus padres y sus educadores lo que más anhelamos es que sepa construir el camino por su propia cuenta, que lo ande y recorra con alegría y dignidad. Hoy en día hay muchos caminos, muchas puertas y muchas oportunidades que nos revelan la tecnología, la ciencia, las culturas, la vida. El punto está en saber elegir el mejor camino como individuo y que nos haga personas, que nos haga trascender, aportar a la sociedad. Para el creyente, Dios cuenta como el “camino, la verdad y la vida”. Pero, ¿cuenta para el joven de hoy? ¿Es Jesús entendible para los jóvenes de hoy?