Pura distracción

Estando próximo el fin de este gobierno, salen a la luz una cantidad de denuncias e información que no se había difundido por la persecución de que fueron objeto quienes se atrevieron en algún momento a difundir ciertos presuntos negociados y corruptelas o simplemente porque salta el mal reparto.

Parece que se va perdiendo el miedo. Se está entregando información por algunos funcionarios del gobierno que se han hastiado de la forma en que se amañaron ciertos contratos y por los sobreprecios de algunas obras faraónicas de la revolución.

Legisladores del oficialismo han salido a denunciar y reconocer que hay mucha tela que cortar en el tema petrolero. Los nombres de dos exfuncionarios uno de los cuales llegó luego de larga trayectoria a ocupar el Ministerio de Hidrocarburos y el otro la Gerencia de Petroecuador, hacen que ahora el Presidente se sienta “indignado” por las revelaciones.

En el caso de los papeles de Panamá el legislador oficialista denuncia que hay más de 30 mil millones de dólares de Ecuador en paraísos fiscales. Hay que preguntarse: ¿cómo logró establecer la cifra y como investigó los orígenes del dinero? Mientras tanto será otra nube con la que se trata de ocultar la crisis que vive el país por el mal manejo económico.

Tener dinero en otros países algunos calificados erróneamente por Ecuador como paraísos fiscales no tiene nada de malo, mientras el dinero no sea producto de lavado o defraudación. Empresarios o simples personas naturales pueden tener motivos diversos para tener dichas cuentas, desde familiares hasta comerciales y eso no lo convierte en ilegítimo. Es probable que el mismo Presidente o su señora tenga cuentas en Bélgica y no significa que el patrimonio sea chueco.

Recordemos que fue este gobierno de mentes lucidas y manos limpias el que puso un impuesto a la salida de capitales y trabas a la inversión extranjera, logrando en gran medida ahuyentar a los inversionistas ecuatorianos que prefirieron sacar y poner a buen recaudo sus patrimonios antes que iniciar nuevas inversiones.

En lo que ya denominan Ecuador Papers no encontrarán nada por muy grande que digan que son los actores. El estiércol les puede salpicar a muchos del gobierno, así que a los denunciantes les pondrán con seguridad un parche en la boca y buscarán otro instrumento que genere humo y distraiga la atención del país. Estamos a puertas de un proceso eleccionario y el desgaste es grande; las cortinas ayudan.