Una recomendación acertada

En un artículo anterior, sugerí la suscripción a la página Adopte un Cardenal, que, por sugerencia de nuestro Papa, Benedicto XVI, creó el Vaticano. En esa página, al ingresar, uno ponía su nombre y su correo y la página le daba el nombre de un Cardenal, por el que uno debía rezar, para que el Espíritu Santo lo ilumine y puedan elegir correctamente a la persona más idónea para gobernar a nuestra Iglesia en estos difíciles momentos.

Hubimos más de 500.000 personas que nos inscribimos en esta página, es decir, habíamos 4350 personas rezando por cada Cardenal, para que elija acertadamente a nuestro Papa. Esta sugerencia de Benedicto XVI ha dado sus frutos, ya que la elección fue rápida y acertadísima, como hemos podido notarlo desde las primeras actuaciones del Papa Francisco.

Su forma de reacción sobre la forma de actuar timorata y encubridora, no puede haber sido más firme. Su pedido para que se ayude a los pobres y se convierta la justicia social en una realidad, aparte de firme, es con ejemplo y con reflexión. Es decir, sus primeros pasos, ya evidencian el acertadísimo camino que va a seguir nuestra Iglesia Católica.

Yo espero que una de las primeras visitas que haga nuestro Papa, sea a América Latina y es especial a Sudamérica, ya que más del 40% de los católicos viven en este continente y es necesario reafirmar nuestra fe. Es muy importante que también se recupere Europa, pero el amor que se siente en la forma de hablar de nuestro nuevo Papa, me hace pensar que Latinoamérica está en sus planes más cercanos.

Hay un favor que el Santo Padre nos ha pedido y que debe ser una obligación para todos los Católicos, que no nos olvidemos todos los días de rezar por él. Necesita de mucha fuerza e inspiración del Santo Espíritu, para realizar los designios de Dios en esta época en que la tecnología, el materialismo y el demonio se han unido para tratar de destruir la fe y la hermandad de los hombres. Dios es uno y nos ama a todos. Recemos por nuestro Santo Padre, el Papa Francisco, para que Dios nos permita ver el cambio que el mundo necesita para volver a encontrar a Dios.

Es de pedir a la prensa que deje de sugerir lo negativo y lo sensacionalista, que deje las críticas y las especulaciones y comience a destacar lo positivo y los resultados que se vayan obteniendo para ayudar al crecimiento y a la fe de nuestro pueblo que es un pueblo bueno, que cree en Dios y que espera que nosotros nos acerquemos unos a otros con solidaridad y con amor, para construir un mundo de solidaridad entre hermanos y de amor a nuestro Creador.