6 octubre, 2024

¡Cuidado te manchas con sangre las manos!

Correa nos ha llevado a tal extremo de polarización de nuestros sentimientos, que nuestra realidad es muy clara: o estás con el o contra él.

Esta postura radical ha sido fomentada por su verborrea y enfrentando el resentimiento popular contra la comodidad de aquél que con el sudor de su frente, ha podido generar algún tipo de bienestar personal. Malévolamente ha manipulado la carestía y la frustración del que no tiene nada que perder, para que se oponga sin razón a los que algo han logrado y tienen cualquier cosa que perder. Aquí no es cuestión de volver al pasado o si el futuro será mejor. Si esto fuera cierto, el refrán popular dice que todo tiempo pasado fue mejor y así mismo que todo futuro es incierto.

Independientemente de cómo definamos al tiempo, nuestra realidad es una pesadilla tétrica y convulsionada. Nadie sabe al día siguiente lo que pasará o contra quién peleará Correa o a quien va a insultar.

Parte de esta farsa de futuro prometida que nos vendió hace un año ocho meses, es el caos que vivimos hoy. Lo que en la campaña era una promesa de un futuro mejor, hoy es una lacerante realidad que nos castiga por los precios elevados de los alimentos, la falta de trabajo y el autoritarismo tiránico de quien no respeta ningún orden establecido. Otra mentira que nos vendieron es el proyecto de la nueva constitución. La mayor parte de los asambleístas, no está capacitado para el puesto que ocupa. En su gran mayoría los parricidas de la patria, eran unos N.N. desconocidos, seudoizquierdosos frustrados, chiros y algunos incluso prontuariados. Ninguno de ellos es jurista y mucho menos son hombres de éxito o representativos de la actividad de la que vivían, si es que alguna ves la habían tenido.

Con la calidad paupérrima de asambleístas anónimos que se eligió, lo lógico es que la constitución también sea misérrima en su contenido.

En la confección de la constituyente se han visto las prácticas más deshonestas, bajas y ruines, propias de la peor escoria de la partidocracia que tanto Correa criticó. Se llegó al chantaje y la filmación oculta. Se recurrió a los golpes testiculares, los insultos, las cosidas de labios, la ofensa a las mujeres, la represión policial, la destitución del presidente de la asamblea, a no darle la palabra a quien no convenía, a mentir, a utilizar el cargo como medida de presión, a hacer mandatos inconstitucionales, a quitar las elementales garantías ciudadanas como los amparos constitucionales, etc.

El actual proyecto tiene muchas sandeces en su interior, pero algunas de ellas son inadmisibles.

Así por ejemplo, se consagra el derecho a las piedras, pero se permite el asesinato a los no nacidos.

A Guayaquil le quitarán el registro civil, el puerto y el aeropuerto.

Se glorifica la unión de homosexuales, mientras se permite el maltrato a la mujer por parte de las autoridades públicas.

Se trató de hacer una carta magna que pretendía poner derechos al orgasmo femenino de las asambleístas de país. Todas estas ridiculeces, traducen una palabrería inútil que enaltece la incapacidad de quienes la hicieron.

Tendremos que votar por una mamarrachada hecha al apuro y con trampa. El Corcho nombró ilegalmente una subcomisión que irrespetando a las comisiones, se dedicó a mochar artículos o a pasar incisos nuevos, para convertir en legalidad aquello que por apuro o por sueño se pasó por votación en la madrugada y que resulta una traición al mandato del pueblo ecuatoriano.

Lo que votaremos en el referéndum es una degeneración constitucional.

¿Como se puede aceptar que el secretario de la presidencia junto con un asesor español, a última hora redacten, modifiquen o supriman textos que no fueron discutidos sino borregamente votados y que nadie conocía?

La aprobación de doscientos textos en dos días raya en el cinismo de quienes piensan que los ecuatorianos padecemos del síndrome de estupidez relativa.

Sin embargo, la mayor inmoralidad de estos desfachatados, está en la pretensión de perpetuarse en sus funciones en el mal llamado congresillo, que es inconstitucional desde cualquier punto de vista.

El referéndum anterior y el estatuto imponen la disolución de la asamblea el día 25. No existe la posibilidad de que nadie, por mucho vacío jurídico que ellos mismos hayan dejado, se pueda perpetuar en un cargo que no existe después de esa fecha.

¡La definición es ahora!

Los que voten por el SI mancharán con sangre sus manos al ser cómplices del asesinato de todo niño que no pueda nacer. Los que voten por el NO, estaremos por la defensa de Guayaquil y por la democracia que no admite la perpetuación de los tiranos. Yo votaré mil veces NO y lucharé como sea o donde tenga para que todos lo hagan.

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  1. Estoy de acuerdo contigo Miky…es el momento de demostrarle a este señor y a su «borregos» de la Constituyente que el pueblo pensante del Ecuador no va a permitir que se lo engañe con tanto descaro y mala intenciòn. Es la HORA de actuar y darle una lecciòn de bravura y cojones a este miserable bravucòn. Se deberìa mantener una lista PUBLICA de todos aquellos mal llamados «guayaquileños» que han dejado y siguen dejando pisotear a su ciudad y provincia. No podemos dejar que la Historia los olvide y que continuen impunemente caminando por la ciudad que traicionaron.

  2. Es verdad, apreciado Miguel, para Correa, el que no está con él está en contra de él. Pero esa es una pésima actitud en la mayoría de los ecuatorianos; por lo general, cuando trato de ser objetivo y veo lo bueno y lo malo de tal o cual personaje (llámese en un caso Correa o en otro caso Nebot), la gente sólo ve lo malo que digo, y me atacan diciendo que estoy en contra… me ha pasado en este mismo medio.

    Por esa razón, muchos colaboradores no pueden ver algo bueno en el Gobierno, porque si lo ven puede que parezcan pro-Correa.

    Es que quien conoce algo del espíritu humano (y trata de ser algo justo… sólo un poco) sabrá que no todos y no siempre podemos aprehender las cosas de manera integral, notando los matices.

    Definitivamente, estoy de acuerdo: Correa polariza, pero… ¿sólo Correa polariza? ¿Qué pasa si alguno de nosotros se atreve a hacer una observación, una crítica a Nebot, por real que sea?, que los seguidores de Nebot, enceguecidos, pondrán al criticador, no en el banquillo de los acusados, sino que lo harán subir al mismo cadalso.

    Y sí, según el Proyecto de Nueva Constitución, se va a quitar el Registro Civil, el aeropuerto y el puerto marítimo de Guayaquil a sus actuales administradores (no a los guayaquileños, eso no se podrá nunca). Pero parece que nos estamos olvidando que no son sólo esas optimizadas empresas del Puerto Principal, el mentado Proyecto afecta a TODA ciudad que se haya hecho cargo de alguna de ellas, como Quito. Me parece que, como decía Piedad Larrea Borja, hay que ver la realidad con lente de contacto y no con lente de aumento (lupa).

    Como ya he dicho muchas veces, VOTARÉ NO, por mi país y por mis conciudadanos, por Manta, por Esmeraldas, por Guayas, por Santa Elena, por Tungurahua (mi tierra), por Carchi, por Sucumbíos, por Loja, por Galápagos, por Pichincha (mi residencia)…

  3. HACE RATO QUE CORREA TIENE LAS MANOS MANCHADAS DE SANGRE FUE EL MENTALIZADOR DE TODA ESTA TORPE ASAMBLEA PROSTITUYENTE,ES LA PEOR PORQUERIA QUE IRA A LA HITORIA COMO LO MAS TREMENDO
    DE EL PAIS…ES POR ESO QUE TODOS TENEMOS QUE VOTAR NO Y MIL VECES NO, POR DEFENSA DE NUESTRA QUERIDA CIUDAD Y DE SU ALCALDE XQUE AHORA SERA EL MAÑANA QUIEN SABE QUIEN..Y SERA DE OFENSA EN OFENSA TEENEMOS QUE PARAR ESTOS ABUSOS SALGAMOS HOY AL MEDIO DIA A LA UNCION CIVICA…DEFENDAMOS NUESTROS DERECHOS…
    Y PIDAMOS QUE SE PUBLIQUEN LOS NOMBRES DEDE LOS QUE DICEN SER GUAYAQUILEÑOS, PARA QUE LA GENTE LOS CASTIGUE—
    VIVA GUAYAQUIL INDEPENDIENTE

  4. Micky, el problema no es él, el problema es los 13 millones de ecuatorianos y ecuatorianas que le seguimos el juego a una sarta de adefesios. No nos dejemos engatuzar por cada show que nos presentan al día mientras se llevan en peso al país.
    Mayra.

  5. Completamente de acuerdo con Mayra.

    Si Correa dice «bestias salvajes», se llenan los medios de comunicación con comentarios sobre el tema, lo mismo con lo de «gordita horrorosa» y demás calificativos descalificadores que le da la gana.

    NO HAY QUE PARARLE BOLA, porque es una de sus tácticas para hacer que la atención se desvíe de los temas centrales. Hay que condenarlo, eso sí, pero no darle tanta piola.

    Por eso consegui pasar las cosas por debajo de la mesa, entre gallos y media noche (literalmente) y con actos de «magia»… igual que los antiguos partidos que dominaron el espacio político ecuatoriano (PRE, PSC, ID, etcétera).

  6. Una vez más Dr. Palacios, reciba usted mis más sinceras felicitaciones por su tan acertado artículo. Los guayaquileños tenemos que levantar muy altivamente nuestra voz y con nuestros puños alzados formar un solo puño, para impedir que quién funge de Presidente de nuestra República,nos quiote instituciones que son tan nuestras como el Puerto Marítimo, el actual Registro Civil, que és la antípoda del anterior y el nuevo aeropuerto José Joaquín de Olmedo.Además no podemos permitir que una serie de mamarrachadas, como el derecho al orgasmo femenino (que todo hombre sabe que debe proporcionárselo a su pareja),la legalización de la unión entre parejas del mismo sexo, la aceptación del aborto, etc…

    Por todas estas estupideces, que parecen surgidas de un cerebro cuya supina ignorancia no le permite discernir entre el bién y el mal, yo votaré NO, en el próximo referendúm.
    Gabriel Chérrez.

  7. Estimado Sr, Palacios,
    Cada vez que ud. escribe, me quita de la boca las palabras correctas para definir la PENOSA y DESGRACIADA situacion en que estamos.
    Lo felicito. La unica esperanza para nosotros, es que los que aun estan encandelillados por la verborrea oligofrenica de este sujeto a quien eligieron presidente, piensen un poco en ese futuro incierto que esta a la vuelta de la esquina y que se convertira en un presente MAS MISERABLE del que podamos imaginar.
    NO Y MIL VECES NO!
    Viva Guayaquil!

  8. Art. 46.-Las niñas, los niños y adolescentes gozarán de los derechos comunes del ser
    humano, además de los específicos de su edad. El Estado reconocerá y garantizará la
    vida, incluido el cuidado y protección desde la concepción.

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