10 mayo, 2025

Comentario

¿Hasta cuándo las ofensas?

Hace aproximadamente cuatro años, se publicó en Quito el libro Irradiación de 1809, Historia de la Academia Nacional de Historia 1909‐2009”. Esta obra se escribió para conmemorar el centenario de la citada institución. Su autor la inició con un capítulo dedicado a la Independencia de Ecuador. Para mi asombro, no había referencia alguna al 9 de octubre de 1820. Inmediatamente procedí a escribir una carta de protesta a Juan Cordero Íñiguez, presidente de la mencionada academia, y presenté mi renuncia irrevocable. Yo no podía formar parte de una agrupación que despreciaba la independencia de Guayaquil. Juan me contestó indicando que no era una obra publicada por la Academia Nacional de Historia, había sido iniciativa de uno de sus miembros, solicitándome retirar mi renuncia. Le contesté que no lo haría ya que él había escrito el prólogo y debió haberse dado cuenta de tan lamentable omisión.

Han transcurrido los años y un nuevo libro se ha publicado en Quito sobre la Revolución Juliana, su autor es Juan Paz y Miño. Para mi sorpresa, quien escribe el prólogo es Juan Cordero. Lo sustancial se resume a continuación:

Alfredo Escala Maccaferri

Antonio Machado, el genial poeta español, decía en uno de sus versos: “Caminante no hay camino, se hace el camino al andar”, queriendo significar que el ser humano no viene al mundo con una ruta trazada sino que le toca hacerla. Algunos pierden el sendero al dejarse llevar de las pasiones o buscar única y exclusivamente el propio interés. Esos viajeros de la existencia pueden tener éxito momentáneo, pero, al no dejar ningún legado espiritual, poco a poco se pierde el recuerdo de sus existencias. Otros, en cambio, ponen lo mejor de sí en ir burilando una serie de obras en beneficio de sus semejantes. Cuando la labor no solo se refiere a una sola faceta, el beneficio social para sus semejantes es mucho mayor. Ejemplo de un hombre de múltiples méritos fue el Doctor Alfredo Escala Maccaferri quien falleció en esta ciudad en medio de la consternación de quienes lo conocimos y apreciamos al médico estudioso, bien intencionado e idealista que siempre fue.

Alfredo, venía profesando con singular conocimiento la ciencia de la medicina, cumpliendo con el juramento Hipocrático, siempre conservando la calma haciendo que su conducta inspire confianza al paciente. Discípulo de Galeno, Ambrose Paré, Miguel Servet, Pasteur y Lister había ganado para la profesión médica una alta reputación por sus conocimientos y por la importancia que le daba al aspecto ético.

Un alimento completo

Cartel de lactancia materna

La novelería hizo que la mujer, por los años cincuenta, ya sea por pudor, comodidad o estética, prefiera dar biberón a su hijo en vez de darle el seno. Luego vinieron las dudas de si tengo o no suficiente leche, etc. Hasta comienzos del siglo pasado, si una madre no tenía suficiente leche, se contrataba una nodriza para que el niño crezca robusto, sano y fuerte.

La industria presentó entonces las leches artificiales (inicialmente se daba leche evaporada para aumentar las calorías y teóricamente nutrir mejor al bebe, aunque la hiperosmolaridad hiciera más daño) y vieron un negocio fabuloso en aprovecharse de la ignorancia y comodidad de las madres, para ganar dinero vendiendo una leche de muy inferior calidad para alimentar a lo más importante que tiene el ser humano: sus hijos (para suplir el seno).

La casa no es una cosa

No es solamente un objeto, No es una cosa. Es un proceso… Como la vida, es una obra en constante cambio, y, siempre necesitamos cambiar. Crece, decrece y se modifica conforme a las situaciónes y circunstancias de sus usuarios.

Aunque, posiblemente, los términos están mal utilizados, este escrito está específicamente dirigido para los ciudadanos de clase media.

Está escrito para quienes compran la casa ya construida y pierden (por no saberlo) el derecho al pataleo. La compran por razones varias, para mejorar su estatus, por especular con la plusvalía, por protección familiar, y otros motivos más que se nos escapan al momento. Creemos que un gran porcentaje (tal vez algo más del 80%) de viviendas compradas construidas son alteradas o reformadas durante el tiempo en que se usan.

El paulatino uso de la superficie vacía de terreno y la remodelación y crecimiento de los espacios interiores se producen por movilidad familiar –aumento o disminución-, modificación de las necesidades del grupo o por el simple hecho de “modernizar” lo interno para mayor expansión y comodidad.

Con las alas heridas

Alguna vez alguien muy querido me dijo que todos tenemos una, o varias, heridas existenciales. Algo así como un pasado que no podemos soltar, una pérdida irremediable o un ejército de demonios internos que alteran nuestra integridad. Lo más lamentable de estas heridas existenciales es que no son dolores específicos, como decir “me duele la cabeza” o “me duele que me hayas mentido”. No. Éstas se apoderan de todo tu cuerpo y toda tu alma. Están en todos lados y no están en ninguna parte. Vienen y van, pero siempre están ahí.

Piensas que la vida es buena porque tienes una linda familia y un buen trabajo. Te sientes contento. Pero llega entonces la noche, ¡Ay de esa noche! Afuera hay una paz invernal y una quietud nocturna, pero dentro de ti bailan los duendes del malestar sinsentido. De repente te invaden sensaciones extrañas, gritos ahogados de dolores sin nombre y sin razón. ¿Pero qué demonios está pasando? Pues probablemente se trata de tu herida existencial. Le entraron ganas de visitarte, a la muy conchuda esta, ¡sin avisarte siquiera! Para recordarte que aún sigue vivita y coleando y que tienes que sanar. Tenemos que sanar.

Por qué no celebro el 25 de julio

Quienes me conocen suelen preguntar en estas épocas por qué no celebro el 25 de julio-el “mes de Guayaquil”, le dicen- como acostumbra hacer la mayoría motivada por lafundación española de la ciudad. Siempre contesto lo mismo: el mes de Guayaquil esúnica y exclusivamente octubre, en memoria del 9 de Octubre de 1820, fiesta de libertad,independencia y autonomía. No hay más vueltas que darle.

Siempre he sostenido y sostengo que solo las ciudades que aun arrastran rezagoscoloniales celebran fundaciones españolas. Equivocado o no, es mi opinión. Si varioscantones del Ecuador celebran su fundación española, enhorabuena por ellos, pero elGuayaquil del cual provengo, conozco y vivo a diario, no. Guayaquil es lo que es a partirdel 9 de Octubre de 1820. Esa es su real fecha de fundación moderna que tuvo su partidalegal de nacimiento en el Reglamento Provisorio de Gobierno aprobado por la JuntaElectoral de la Provincia de Guayaquil, el 8 de Noviembre de 1820 (hoy mal llamado el díade la provincia del Guayas).

Las Perchonas

Dice el refrán popular que la mujer contrae matrimonio: de los 20 a los 25, si ella quiere, de los 25 a los 30, si él quiere, y de los 30 en adelante, si Dios quiere.

Estos primitivos conceptos eran tolerados por la sociedad ecuatoriana hasta los años 70, pero, actualmente, cuando la mirada moderna se nos impone en este mundo globalizado, la lectura debe ser con un lente diferente, de respeto al ser humano.

Hoy en día, nosotras ingresamos en igual número que los varones a las universidades, y por ello entre los 20 y los 25 nos encontramos estudiando; de los 25 a los 30 buscamos incorporarnos en un escaso mercado laboral a un trabajo estable; y, algunas, inclusive, estamos estudiando un cuarto nivel de educación.

Yo amo a Guayaquil

Guayaquil

Yo amo Guayaquil, mi ciudad, mi sueño, todos mis sueños, ciudad guerrera, ciudad del río, del cerro y de los guasmos. Guayaquil ciudad viva, existente, ruidosa, parlante, ciudad atrapada en un puño, suelta como la silaba que llena la palabra amor.

Ciudad revuelta y escenario de revueltas, ciudad revolucionaria, moderna, cibernética, donde nacen todos los amaneceres, donde vienen a morir los cangrejos voladores después de la procesión del viernes santo. Ciudad libre no imaginada, creada y vuelta a imaginar. Ciudad erigida al andar, que vive una y otra vez hasta el bajar de las aguas.

Ciudad brava, difícil, dura, ciudad tierna ¿qué te mueve? ¿qué te inspira? Guayaquil ciudad envidiada. Ciudad indomable, despierta hasta caer el calor, despierta hasta la brisa, ciudad rezo, entonación, sensación, ciudad avispa.

Mis razones para pintar…

Dios me ha bendecido con diversos dones que inmerecidamente poseo.Me ha dado una inteligencia práctica para sobrevivir, una facultad para pintar y una facilidad para escribir.

Hay tres grupos de personas que ven los cuadros de un pintor. Hay un minúsculo conjunto seres que son los críticos de arte, que conocen de pintura pero no saben pintar. Otro grupo pequeño son los coleccionistas. Sin saber de arte, compran pinturas para presumir. Pero hay otro grupo mucho más numeroso, que está compuesto por la gran mayoría de personas que reaccionan negativa o positivamente frente a un cuadro; pero reaccionan.

Un pintor es aquél que despierta los sentimientos, emociones o sensaciones de aquellos que miran lo que pintó.

La pintura no es una distracción. Es como el aire para respirar. Constituye una de las principales razones para fundamentar el propósito de mi existencia.

¿Noventa y un años de qué?

Hace poco mi bisabuela cumplió 91 años. Celebramos su cumpleaños en un restaurante de ensueño, donde los peces hacían de techo y las paredes eran paisajes. Habían varias mesas alrededor de una mesa central donde estaban la torta y los dulces. Aquella era una torta especial decorada con naipes, las bolitas del bingo, una ruleta y demás sabores del juego; en representación de sus aficiones, pues ella ha sido siempre una gran jugadora. Del otro lado estaba la mesa del buffet saturada de carnes, pescado, ensaladas y risotto, para alimentar el cuerpo queriendo alimentar el alma; ¡y no lo sabemos!

Los invitados bebían y comían copiosamente en sus puestos. En sus rostros se reflejaba el alborozo del goce y la cercanía del encuentro. De vez en cuando se escuchaba una ruidosa carcajada y todos reíamos, aun sin saber de qué se trataba, para no desentonar el coro de la alegría. Entre los más jóvenes no podía faltar la tecnología y su capacidad para comunicarnos con los que están lejos e incomunicarnos con los que están cerca. Pero esa es otra historia.

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