26 abril, 2024

Los retardados

La investigación de los 4 pelagatos es impresionante. Parece que estamos llegando al fin de la ineptitud en el país.

Durante 14 años hemos soportado un Estado morbosamente obeso. Al parecer ocurría en el Gobierno, lo mismo que en la Asamblea. Se elije a un poco de personas de inteligencia menos que mediocre, los que tienen que llenarse de asesores, para que hagan lo que ellos, inútiles, no pueden hacer solos.

Lo que ocurre es lo que debe ocurrir. El Estado tiene que engordar tremendamente gastando el presupuesto en pagar a mucha gente, de los cuales, varios no hacen absolutamente nada.

La mediocridad de la clase política, no sé si es porque en realidad son mediocres, o es la justificación para darle un sueldo a Fulano y a Mengano, o, porque, también puede ser la causa, para formar las trincas y los arreglos bajo la mesa, para sacar mejor tajada del puesto.

Nuestras autoridades están repletas de consejeros, asesores, secretarios, conserjes, amanuenses, y sabrá Dios que otro tipo de bichos raros y venenosos más se inventan para engrosar al Estado. Igual es en los Ministerios y demás puestos de la burocracia.

¿Será que nuestras autoridades son tan ineptas, que no pueden cumplir con su trabajo solos y requieren tantísima ayuda, o es que la irresponsabilidad y la pillería han creado este modus vivendi para que muchos se dediquen a vivir del Estado?

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El perfil psicológico del tirano

Es un individuo de pensamiento acelerado.

Las ideas le fluyen en forma incontrolable hasta llegar a la fuga de las mismas. Dice cosas inconvenientes por que no las razona. Su pensar es expresado mediante una verborrea imparable. Muchas veces incoherente, actúa contrario a lo que piensa y aquello que dice es lo primero que le pasa por su mente. No sabe callar ni respetar el pensamiento ajeno.

El contenido de su juicio es aparentemente lógico, aunque mantiene rasgos paranoideos evidentes. Tiene una suspicacia excesiva. Constantemente vive bajo la sensación de que le quieren hacer un complot o se siente maltratado. Su pensamiento está lleno de ideas de daño, perjuicio y persecución. Tiene una obsesión fanática que nubla su juicio lógico. Es obsesivo y suspicaz en extremo, sin llegar a confiar jamás en nadie. Si aparenta que lo hace, solo lo hace por conveniencia y mientras le sirva quien supuestamente confía, para posteriormente desecharlo y luego odiarlo.

2 comentarios

  1. Mientras más piedras se coloquen en el camino de los emprendedores, más personas querrán vivir del discurso político.

  2. Lamentablemente las cuotas políticas, obligan a los gobernantes a inflar la nòmina de las empresas públicas, y no necesariamente son personas capacitadas para el puesto. Ademàs el partido polìtico, obliga a los ubicados a pagar la cuota para el sostenimiento del partido.
    Còmo terminar con estas cuotas polìticas??, simple, que el gobernante cree los puestos de trabajo ofrecido en campaña.

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