El liderazgo relacional en la legitimación de decisiones
El propósito de este capítulo es analizar la propiedad que tienen las Relaciones Publicas de legitimar decisiones. Aunque el análisis puede plantearse también preguntando ¿Qué tipo de relacionismo contribuye a dar legitimidad a las decisiones organizacionales en el mundo de hoy?
Legitimar es darle veracidad y contenido real a un proceso decisorio en el campo institucional. Ayer las decisiones emanaban de la fuerza o del capital, hoy tienen su centro en el conocimiento, y este fluye productivamente en aquellas sociedades que han aprendido a comunicarse. Esta premisa indica que existe una intima relación entre conocimiento y comunicación, de lo cual se deduce que la legitimación de decisiones es más frecuente en aquellas sociedades que reúnen estas características.
La decisiones en sí misma la culminación de un acto previsivo gerencial. Es buena cuando se analizan todos los factores, pero solo es legítima cuando participan todos los actores. La siguiente fase decisoria, la ejecución, esta íntimamente relacionada con la primera. Hoy es difícil lograr que algo se haga en una comunidad, si en la decisión de ese algo no hubo alguna forma de participación. Esta afirmación explica el fracaso de algunas democracias representativas y la caída estrepitosa de la empresa jerárquica.
La percepción
El estudio de las ciencias de la relación se centra más en la percepción de los mensajes que en la emisión de órdenes e instrucciones, su objeto es buscar el equilibrio entre los grupos para que actúen con armonía y logren la misión con eficacia. Eso explica los cambios observados en las organizaciones que han erradicado, quizás por siempre el proceso lineal de la comunicación, por los efectos perversos que ocasiono. Uno de ellos, el uso inapropiado del relacionismo, que en la segunda mitad del siglo XX acompaño las decisiones de los órganos de poder, bajo la forma predominante de la racionalidad técnica, sin considerar las consecuencias. Aquí cabe señalar como dice Carlos Saavedra (1992) que en “Relaciones Publicas lo que cuenta es el factor humano, el hombre que su oculta tras su propio rostro y que hay que descubrir sin herirlo ni avergonzarlo”
La respuesta a la percepción, convalida el efecto comunicacional e incorpora a los actores en un proceso infinito de relación, que los motiva a encontrarse consigo, a valorarse y sentir respeto por los demás. El proceso perceptivo tiende a crear conciencia pues interpreta significados con base en aprendizajes, experiencias, motivaciones y necesidades. Es decir procura la misión de “aprender a vivir”
Es a partir de la percepción que se generan las expectativas, pues la sensación que se recibe provoca acciones u omisiones, impulsa o limita el desempeño y como consecuencia de ello, el actor se vuelve apto para legitimar.
El avance de las tecnologías y su aplicación en todos los ámbitos, cambio el proceso social de la comunicación, pero a la vez lo fortaleció, porque al revalorizar el factor humano individual le dio el cauce al conocimiento y facilito la relación del saber con la información, que hoy son las líneas determinantes del desarrollo de los pueblos. De aquí surgen los cambios que afectan la legitimación y propician el surgimiento del liderazgo relacional.
