Como docente y académica, no puedo encontrar nada más repudiable que el hecho de que políticos sin capacidad legal que los habilite, pretendan desconocer la autonomía universitaria y amenacen con expulsar una universidad del país.
Por principio, la universidad es autónoma y gobernada por su Consejo Superior, con independencia política y administrativa. Esto implica elegir sus propias autoridades sin injerencia del poder político, pues ese es el espacio donde se expresa la conciencia de la sociedad, fomentando el pensamiento crítico, libre y autónomo.
En las últimas semanas, la academia ecuatoriana ha visto con rechazo cómo personajes políticos pretenden violentar la autonomía universitaria, llegando a decir que la designación del nuevo rector de la Universidad Andina constituye un «insulto al pueblo ecuatoriano».
Soy ecuatoriana y el único insulto es que se pretenda -a garrotazos y sin la investidura legal pertinente- imponer la tesis de la retroactividad de la norma, mediante una resolución a todas luces contraria a derecho, pues hasta el 12 de octubre de 2015 era exigible el título de maestría y no de PhD para ser rector universitario en el país.
Afortunadamente, 4 consejeros académicos de un total de 10 del Consejo de Educación Superior, mediante un comunicado, lamentaron «profundamente que el Gobierno nacional, a través de la mayoría oficialista del CES, haya tomado esta desacertada medida, en violación de la Constitución y de la Ley Orgánica de Educación Superior».
Lo bueno: verdaderos académicos, sin temor, alertan a la comunidad universitaria «para que siempre y especialmente en este período electoral que vive el Ecuador, defiendan real y coherentemente la autonomía universitaria, impidiendo que las universidades sean convertidas en botín del partido de Gobierno o de partidos de la oposición, o en plataformas electorales».
Lo patético y grosero: que algunas de las más altas autoridades y en pleno siglo XXI, incumplan norma expresa y con cualquier pretexto desconozcan y vulneren la autonomía universitaria.
TOTALMENTE DE ACUERDO CON LA SENYORITA DIANA ACOSTA. ES AGRADABLE LEER PENSAMIENTOS BIEN PUESTOS DE UNA PERSONA QUE EJERCE LA ACADEMIA.
EL GOBIERNO AUTORITARIO Y PREPOTENTE DE RAFAEL CORREA, JUNTO CON LOS TECNOCRATAS DE PACOTILLA DE LA «SENECYT», SO PRETEXTO DE IMPONER A LA BRAVA, ALTISIMOS REQUISITOS DE «EXCELENCIA ACADEMICA», NO SOLO QUE DESPRECIAN EL TALENTO DE PROFESIONALES ECUATORIANOS ASPIRANTES A TRABAJAR EN LA UNIVERSIDAD ECUATORIANA, SINO QUE ADEMAS DE DEJAR SIN ACCESO A LA EDUCACION SUPERIOR DE LA MAYOR PARTE DE LA JUVENTUD ECUATORIANA, PRETENDE FILTRAR EN NUESTRA UNIVERSIDAD (AHORA, A LA FUERZA), LA COLONIZACION ACADEMICA NORTEAMERICANA AL ESTILO «TECH», FORMANDO UNA ELITE ACADEMICA «SNOB», QUE NO PRECISAMENTE ES DE EXCELENCIA ACADEMICA, SINO QUE ES MAS BIEN, UN GRUPO DE BORREGOS CON TITULOS «Ph.D» MADE IN LAS «TECH» NORTEAMERICANAS O INGLESAS Y QUE SEAN ALINEADOS A LOS DICTAMENES DEL DICTADOR CORREA Y DEL PARROQUIANO RENE RAMIREZ.
ESTA ELITE «SNOB», DE MENTALIDAD DISCRIMINATORIA Y EXCLUYENTE, SE CREEN QUE SON LOS «ILUMINADOS» DE LA TECNOLOGIA Y EL PROGRESO. DICEN QUE DEBEN SER PAGADOS A LA MISMA ALTURA QUE SE PAGA EN DUBAI, EN INGLATERRA, EN ESTADOS UNIDOS, SIN PENSAR QYE NUESTRO PEQUENYO PAIS -ECUADOR, NO ESTA A LA ALTURA NI TECNOLOGICA NI ECONOMICA DE ESAS NACIONES.
ADEMAS, SON DE VORACES APETITOS DE OPORTUNISMO (VER EL CASO «YACHAY TECH»), GASTANDO A DIESTRA Y SINIESTRA Y SIN NINGUN REPARO, LOS RECURSOS ECONOMICOS DE NUESTROS IMPUESTOS, PARA SER ELLOS, LOS UNICOS QUE SE ENRIQUEZCAN Y PREVALEZCAN.
ELLOS HACEN EN «YACHAY», LO QUE LES DA LA GANA, PORQUE HASTA AHORA, NO HA HABIDO NADIE QUIEN LES PARE EN SECO.
DONDE ESTAN LAS AUTORIDADES DE TRANSPARENCIA Y DE CONTROL ANTICORRUPCION?
ESTOS TECNOCRATAS Y «SNOBS» ACADEMICOS, TIENEN EN SUS MENTES EXCLUIR A CUANTOS MAS SE PUEDA DEL ACCESO A LA UNIVERSIDAD PUBLICA, TANTO A CANDIDATOS PARA PROFESORES UNIVERSITARIOS, COMO A JOVENES ESTUDIANTES.
EL SISTEMA «SENESCYT-YACHAY»: TODOS SUS TECNOCRATAS Y OPORTUNISTAS HAMBRIENTOS DE RIQUEZA PARA SI MISMOS, DEBEN SER TUMBADOS.
Y SI NOSOTROS COMO PUEBLO, NO HACEMOS PREVALECER NUESTRA AUTORIDAD COMO MANDANTES, ENTONCES, ELLOS HARAN DE NOSOTROS LO QUE QUIERAN.