26 abril, 2024

Bolívar

“Un sargento ha sido condenado a muerte en Consejo de guerra por una grave infracción. En capilla está contrito, con santa pesadumbre, le pide a Dios misericordia. Una joven hermosa fuerza la guardia del dictador: desesperada, loca, penetra en sus habitaciones, cae a sus plantas, hiere los cielos con ayes de dolor amorosísimo. El General permanece inexorable: la sentencia será cumplida.”

“ Muchos años después, cuando se supo en Venezuela el fallecimiento de Bolívar, un viejo se dirigía una mañana a la iglesia de una aldea de los Llanos, seguido de su mujer y sus hijos, todos de luto. Oyeron con profunda devoción por el alma del Libertador; y se volvieron a su casa, cuyas ventanas y puertas fueron cerradas. No comió ese día la familia, y la gente de la calle oyó dentro un lastimero llanto hasta la media noche. Era ese viejo el sargento fusilado al pie del fuerte.”

Lecturas de Montalvo Pág. 10, 1898

Tal era la tiranía de Bolívar, inexorable en sus decisiones políticas y militares pero atento a las desesperadas exigencias de una joven.

Con tanto desprendimiento que en Diciembre de l830 refiriéndose al gobierno de turno integrado por sus enemigos, llamó al pueblo a unirse, no aspirando a otra gloria que a la consolidación de Colombia (la grande) invitando a los colombianos en sus últimos votos por la felicidad de la patria, y manifestando que si su muerte contribuiría para que cesen los partidos y se consolide la unión, él iba a bajar tranquilo al sepulcro, según su última proclama de San Pedro Alejandrino.

El legado de Bolívar y su sepulcro, han sido mancillados por los tiranos de hoy, que pretenden gobernar en su memoria, distorsionando los principios bolivarianos y pretendiendo engañar al pueblo de las naciones gran colombianas hoy cautivas, que el Libertador seguía los principios socialistas que fueron proclamados por Carlos Marx, a partir de l842, años después de la campaña de Bolívar, haciendo de la historia política un enredo que el pueblo conoce como “arroz con chancho” y que no es otra cosa que la deformación de la memoria de Bolívar.

Parecería que Bolívar anticipaba a inicios del siglo XVIII lo que iba a ocurrir en los albores del siglo XXI al proclamar en su lecho de muerte que sus enemigos abusaban de la credulidad del pueblo y hollando lo que es más sagrado, su reputación y su amor por la libertad han torcido sus principios y acciones por un falso régimen que a más de tres años de padecerlo se sigue inaugurando cada día para eliminar a la partidocracia de siempre, pero usando sus mañas y trapicharías mediante acciones ilícitas para el logro de mayor poder, olvidando la libertad y transparencia que inspiró Bolívar que no siendo perfecto, para comprenderlo hay que situar los hechos en la realidad socio-política de las nuevas naciones de esa época.

Basta con referirme a la bochornosa Asamblea nacional, cuyo presidente se vanagloria de su inacción legislativa luego de jugar a las escondidas en el edificio de la Asamblea, y aplicando con ello la imposición del ministerio de la ley o si la Asamblea osa dictar alguna ley, esta es castrada con el veto presidencial, cuando ello conviene a los designios de la dictadura.

Artículos relacionados

El Contubernio

Bolívar, el eterno vencedor, desconoce el mérito de Sucre en la rendición de Pasto y se atribuye el sometimiento de la región, cuando la verdad es que no pudo pasar por sí solo las infranqueables posiciones españolas en las alturas de Bomboná: “El general Sucre, el día de la acción, no sacó más ventajas que yo, a decir verdad, nosotros hemos tomado el baluarte del Sur y él se ha cogido la Capúa de nuestras conquistas (notable triunfo de Aníbal tras el cruce de los Alpes). Yo vuelo a Quito a ver si los bochinches del Sur cesan; lo peor es que tengo una fuerte inclinación a no dejar que se burlen de Colombia, porque es muy duro ceder después de triunfos (…) Sucre quedará mandando en Quito y yo pasaré al Sur con las tropas, con el objeto de pacificar aquello y de tener una entrevista con San Martín. Supongo que en esta marcha militar no perderé nada, al contrario, redondearé a Colombia, según son mis deseos y deben ser las probabilidades; porque Vd. sabe que Guayaquil no es Cartagena, que se defiende con sus murallas, y porque además yo empleo más la política que la fuerza en las empresas de esta naturaleza (…) y con esto adiós, hasta Quito” (Carta a Santander desde Pasto, 09/06/1822).

Una vez en Quito, el Libertador se dedicó a escribir y a expresar en todos los tonos posibles su satisfacción por haber concluido la independencia de Colombia: a San Martín: “Tengo la mayor satisfacción de anunciar a V.E. que la guerra de Colombia está terminada”. A los generales marqués del Toro y Fernando Toro: “Este hermoso país, tan colombiano y tan patriota (…) formará el más grande departamento de Colombia”. Al general Juan de Escalona: “Ya estamos en Quito libre y colombiano. Todo está por nosotros en este vasto país, sin que nos falte más que Guayaquil, para donde parto a llevar la ley de Colombia.” Y a Santander: “solamente Guayaquil me da cuidado, pero Guayaquil por su cuidado puede envolvernos también en una de dos luchas: con el Perú, si la forzamos a reconocer a Colombia o con el sur de Colombia si la dejamos independiente, triunfante e incendiaria con sus principios de egoísmo patrio”. Guayaquil se convirtió en instrumento y medio para alcanzar metas. No importó la historia ni lo que sus hombres se proponían.

La mujer indígena

A finales del año 2019, se celebró el “día de la NO violencia femenina”. Aprecie en la TV, la Av. 9 de Octubre, llena de mujeres. Las felicite públicamente a través de […]

No hay comentarios

  1. Este tema (Bolivar mancillado por los tiranos de hoy)merece un comentario, breve, pero se lo puede desarrollar en otro momento:
    Que más tirano que Bolívar, que más ególatra que Bolívar. Gran maestre, culpable de esta debacle latinoamericana.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

×