28 abril, 2024

Joven: ¿Cómo vives la cuaresma?

¿Pregunta retórica? ¿pregunta motivacional? O ¿pregunta orientadora? Hay muchos jóvenes en parroquias, colegios, universidades verdaderamente católicas que tienen claro la necesidad de los tiempos fuertes para caminar en los tiempos cotidianos con sentido. Más si es un sentido de vida plena, digna y justa que anhela el corazón de un creyente, de un cristiano.

Para el no creyente, el indiferente o el apático simplemente le digo, algún amigo creyente tendrás, cuestiona por qué hace lo que hace. Y ¿qué hace un joven en cuaresma? El rostro, la sonrisa y ciertas frases que animan a seguir un proceso de crecimiento, de búsqueda horizonte, de marcar la diferencia es lo que nos dará pistas de credibilidad que es coherente con lo que dice, siente y hace. ES UN JOVEN EXTRAORDINARIO no por lo que hace, sino por lo que piensa. Piensa que el mundo se puede transformar y que la historia de muchos hombres y mujeres han sido significativas porque han dejado una huella en la ciudad, el mundo y no solo en su corazón como muchos piensan que son los actos religiosos. 

JOVENES EXTRAORDINARIOS porque no quieren ser del montón, porque encuentran razones para vivir mejor, eso es lo que convoca, provoca y se evoca en la cuaresma y en los tiempos fuertes del cristianismo: navidad, semana santa, pentecostés. El resto del año se desenvuelven en la cotidianidad de lo ordinario donde realmente se manifiesta lo que se es. El ser es uno solo, pero se manifiesta de muchas maneras. La unidad o coherencia es la clave de la credibilidad de nuestros actos. 

El joven está en búsqueda, aprende por ensayo y error, como todos los humanos, pero por su misma juventud busca crecer con otros, allí lo que siente internamente lo practica-realiza externamente, los demás reconocen la coherencia en sus ojos, sonrisa y alegría de un acto hecho con honestidad, eso es la religiosidad que se promueve en los tiempos fuertes del cristianismo. Como dijo el Papa Francisco al explicarnos la cuaresma: “es celebrar el paso de la esclavitud a la libertad. Por ello, el paso por el desierto es el paso hacia la libertad. Dios educa a su pueblo para que abandone esclavitudes y experimente el paso de la muerte a la vida. Como un esposo nos atrae nuevamente hacia sí y nos susurra palabras de amor en nuestros corazones” (Mensaje de Cuaresma 2024).  

Quisiera decirles, como a los jóvenes que encontré en Lisboa el verano pasado: «Busquen y arriesguen, busquen y arriesguen. En este momento histórico los desafíos son enormes, los quejidos dolorosos —estamos viviendo una tercera guerra mundial a pedacitos—, pero abrazamos el riesgo de pensar que no estamos en una agonía, sino en un parto; no en el final, sino al comienzo de un gran espectáculo. Y hace falta coraje para pensar esto» ( Discurso a los universitarios, 3 agosto 2023). Es la valentía de la conversión, de salir de la esclavitud. La fe y la caridad llevan de la mano a esta pequeña esperanza. Le enseñan a caminar y, al mismo tiempo, es ella la que las arrastra hacia adelante.

Te comparto tres hitos que son claves en el itinerario de la cuaresma como camino hacia la libertad que nos trae Jesús Resucitado en la pascua. Seguimos los evangelios de los tres primeros domingos de cuaresma.

Primer hito: nos lo presenta Marcos (1, 12) “El Espíritu empujó a Jesús al desierto. Se quedó en el desierto cuarenta días, dejándose tentar por Satanás; vivía entre alimañas, y los ángeles le servían”. Saber asumir los desafíos de la vida, enfréntalo, eso es el desierto. El saber atravesarlo trae el saber vivir entre ángeles y demonios, así es la vida, vivimos entre buenos y malos, somos a veces buenos y malos, libres y esclavos. Atrévete a caminar los desiertos de la vida

Segundo hito, nos dice el mismo Marcos (9, 2-10): – “subió con ellos solos a una montaña alta, y se transfiguró”. La vida, la realidad se puede transformar. Hay que hacerse cargo de ella, cargar la realidad y subir a la cima de las montañas que son nuestras metas y objetivos No todos podemos subir, no nos sentimos capacitados, pero todos podemos entrenarnos si queremos, si vemos. La máxima satisfacción es gozar del logro, ver la realidad desde otra perspectiva, entonces podemos escuchar al cielo que nos recuerda la nube: “este es mi hijo amado –Jesús – escúchalo y verás como todo puede cambiar. O podemos escuchar el clamor de la tierra, necesitamos sentirnos bien, por ello Pedro nos dice – “!Qué bien se está aquí!”. Contigo, Señor todo es bello y mejor. Es la belleza de un pueblo que se llama Pueblo de Dios. “Gustad y ved qué bueno es el Señor”. ATREVETE A TENER METAS ALTAS.

Tercer hito: lo dice Juan 2, 13-25 EN EL TEMPLO expulsó a mercaderes y cambistas. La Religión del mercado, donde las relaciones se reduce a te doy, pero me das, me porto bien y me ayudas, llevó a la religión de lo puro impuro, la realidad se divide. Jesús busca que todos se unan con Dios, busca otra manera que nos relacionemos con el Padre y entre nosotros no puede ser por interés o condiciones, sino en espíritu y verdad. ATREVETE A CAMBIAR LO SUPERFLUO POR LO PROFUNDO. 

¿Cómo vivir la cuaresma? Con alegría y esperanza demostrando valentía y esfuerzo por hacer de este mundo la casa de Dios, la casa de todos. 

¿CÓMO VIVIR LA CUARESMA?
Tiempo de búsqueda

¿QUÉ ES LO QUE MÁS BUSCAMOS?
Libertad

¿Qué REQUIERE DE NOSOTROS?
Atrevernos a caminar, tener metas altas y ser auténtico-profundo,

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