27 julio, 2024

Quito y Guayaquil: Por siempre y para siempre

I
José J. de Olmedo y Carlos Montúfar
Amaron a su tierra.
Sol quiteño, mar guayaquileño.

II
Quito y Guayaquil, unidos
Por el patriotismo de sus hijos,
serrano y costeño germinaron heroísmo.

III
Olmedo, con el Derecho y la Poesía
encumbró a Guayaquil a su Independencia.
¡Gloria Imperecedera!

IV
Montúfar, su ingenio militar
Enfrentó a la fuerza del mal
¡Quito refulgió de Gloria Eterna!

V
El ecuatoriano ha comprendido
Que Derecho y bayoneta
Nunca han convivido.

VI
Al futuro ecuatoriano, ni el rey lejano
Ni el Libertador cercano
Pudieron ni convencer ni vencer.

VII
Bolívar, recia personalidad varonil.
Grande en la Historia,
Pero…, tan pequeño con Guayaquil.

VIII
Gratitud eterna para nuestros próceres
De mil batallas de verso y fusil
Forjaron el naciente porvenir.

IX
Hoy, añoramos esa entrega.
Aún no hay fértil germinación
Que forje al verdadero Ecuador.

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A buen juez, mejor testigo 9-VII-12

José Zorrilla y Moral fue un poeta y dramaturgo español que nació en Valladolid el 21 de febrero de 1817 y falleció en Madrid el 23 de enero de 1893. Su padre era un hombre conservador y absolutista, seguidor del relator de la Real Cancillería. A sus 9 años, se trasladaron a Madrid, donde su padre trabajó como Superintendente de policía y él ingresó al Seminario de Nobles, regentado por los jesuitas, donde participó en representaciones teatrales escolares. Muerto Fernando VII, su padre fue desterrado a Lerma (Burgos) y él fue enviado a estudiar derecho a la Universidad de Toledo, bajo la vigilancia de un pariente canónigo en cuya casa de hospedó; pero como se distraía en otras ocupaciones, el canónigo lo devolvió a Valladolid para que siguiera estudiando allá, junto a sus padres, pero por su carácter díscolo, la rigidez de los estudios su atracción por el dibujo, las mujeres y la literatura de los diversos maestros de la época, su padre desistió de sacar algo de él y mandó que lo llevaran a Lerma, a cavar viñas. A medio camino de su destierro, robó una mula y huyó a Madrid y se inició en su hacer literario, frecuentando ambientes artísticos y bohemios y pasó por períodos de mucha penuria. Fingió ser artista italiano para dibujar en el Museo de las Familias, escribió y publicó algunas poesías y discursos revolucionarios y terminó perseguido por la policía, refugiándose en la casa de un gitano. Escribió en varios diarios entre ellos El Español y El Porvenir. Se casó en 1838 con una viuda irlandesa con un hijo, con la que tuvo un matrimonio infeliz, teniendo varias amantes. En 1839 empezó a escribir sus dramas, por los que fue contratado en exclusiva por Juan Lombía empresario del Teatro de la Cruz, donde laboró de 1840 a 1845, época en la que estrenó 22 dramas. En 1845 abandona a su esposa y se fue a París, donde mantuvo amistad con Alejandro Dumas, George Sand, Víctor Hugo y Gauthier. Vuelve a Madrid en 1846, al morir su madre y vende sus obras a la Casa Baudry, que las publicó en tres tomos. Recibió varios honores habiendo sido nombrado miembro de la junta del recién fundado Teatro Español y fue nombrado miembro de la Real Academia. En 1885 muere su padre y fue un duro golpe para él, pues su padre se negó a perdonarle.

2 comentarios

    1. ¿Por qué no te gusta? Porque recuerdo el sacrificio de dos héroes ecuatorianos . Montúfar hasta lo hizo con su vida, murió fusilado por las tropas realistas. Saludos cariñosos.

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