El rumbo de la educación ecuatoriana siempre es materia de análisis. Sin temor a equivocarme la educación es no solo el camino de la prosperidad social sino también una estrategia única para salir del subdesarrollo, pero también es la esperanza de grandes conglomerados humanos para mejorar su calidad de vida.
YA TENEMOS SUFICIENTES ANÁLISIS, ES NECESARIO ENTENDER QUE MEJORAR LOS PROCESOS EDUCATIVOS EN EL ECUADOR NO SOLO ES IMPORTANTE SINO URGENTE.
Durante los años de mi vida he conocido de cerca muchas instituciones educativas que han dado asombrosos pasos para la mejora continua situando a las organizaciones -generalmente privadas- en los estándares más altos en latinoamérica… escuelas y colegios cuyos alumnos hablan perfecto inglés al graduarse, algunas modelos en avances en la enseñanza de las matemáticas o del lenguaje, proyectos educativos privados que arrojan deportistas extraordinarios y hasta loables organizaciones que han hecho del arte una forma de elevar el nivel de sus alumnos y hasta el famoso sistema dual de preparación para la gestión y el emprendimiento…
¿Qué ha ocurrido con la educación fiscal?
Durante décadas han “mirado hacia otro lado” cuando uno de estos verdaderos “laboratorios de alta calidad educativa se muestran exitosos”, egoísmo, desconocimiento, falta de interés, lo cierto es que han “marchado en su propio terreno”
El Municipio de Guayaquil desarrolla de manera muy interesante una propuesta centrada no solo en material didáctico, libros, laptops y mochilas inteligentes, sino que avanza más allá preocupándose por EL FONDO Y LA FORMA. Conversar con el gerente de la DASE, empresa pública Municipal dedicada al servicio social y educativo es muy interesante por la claridad conceptual con la cual se maneja para hablar de UN PROCESO DE FORMACIÓN DE DIRECTIVOS DOCENTES, CAPACITACIÓN DE ALTO NIVEL CON UNIVERSIDADES RECONOCIDAS, Y HASTA LA FUNDAMENTACIÓN EPISTEMOLÓGICA DEL POR QUÉ SE DEBE HACER Y SE HACEN LOS AVANCES. Incluso se muestran conocedores del tema de como PISA evalúa a los países en educación y proponen alternativas,
DE PLANO TODO ES PERFECTIBLE y la DASE de Guayaquil lo sabe, sin embargo… ¿por qué la educación pública parece insistir en permanecer trabajando en la forma y no apunta a los aspectos de fondo que cambien de alguna manera a la alicaída educación fiscal. El MUNICIPIO atiende a escuelas particulares de escasos recursos y fiscomisionales, mientras que la educación pública es casi el 80% del número de instituciones educativas del país.
¿Por qué hay organizaciones privadas y hasta el Municipio que corren en sus propuestas educativas, mientras el Ministerio de Educación obeso y anticuado tan solo camina? ¿qué impide el diálogo para aprender de programas exitosos que de hecho existen en el Ecuador para beneficio de los niños y jóvenes sin distingos? ¿Por qué se sigue repitiendo los mismos errores de bulto que han caracterizado los últimos quince años en educación? ¿qué impide el acercamiento del Ministerio a los proyectos bien hechos y validados?
¿No es hora de demostrar que realmente el niño y el joven son la prioridad en materia de educación?
O ¿es sólo un cliché que sirve para ganar elecciones?
