26 abril, 2024

Crear el futuro: ¡Bienvenido 2015!

“¿QUÉ PASA SI SALIMOS DE NOSOTROS MISMOS? Lo mismo puede pasar con cualquiera que salga de su casa a la calle. Puede tener un accidente. Pero les digo, prefiero a una Iglesia accidentada por salir que enferma por encerrarse”. (Papa Francisco, discurso desde la plaza San Pedro, 18 de mayo de 2013).

Al comenzar un nuevo año nos llenamos de varios sentimientos, pero para las personas que desean crecer solo tienen una alternativa: decidir acoger los sentimientos positivos, creadores de vida, que dan sentido y fomentan la esperanza. Para un joven que se está formando en la vida, esto solo es posible si sus padres y educadores lo contagian. Caso contrario requerirá de mucha suerte y creatividad personal para encontrar modelos reales e imitables, que no son siempre los que prevalecen en los medios de comunicación ni los que los jóvenes suelen encontrarse.

Y Una de las características que todos deseamos en ese modelo imitable y real es que sea un LIDER, alguien capaz de manejar su vida (leader=conducir) hacia metas y objetivos que le llenen el corazón de sentido y felicidad. El fin de una buena educación debe ser formar líderes, es decir personas con capacidad de tomar decisiones, que conduzcan su vida a buen puerto. Esto se llama técnicamente, personas autónomas. Para ello debemos arriesgarnos, y aquí cambian las perspectivas. ¿Qué padre/madre de familia desea que su hijo se accidente? Ninguno. Pero ¿qué padre/madre de familia desea que su hijo se enferme del ensimismamiento que vivirá si nunca se arriesga a salir? Lo que pide el Papa Francisco a los cristianos del siglo XXI es que formen una comunidad de creyentes que se arriesguen a tomar decisiones, a cambiar, a crear un nuevo modo de ser y vivir la Iglesia, que se parecerá a muchos adolescentes que se accidentan, pero que aprenden a tomar decisiones que hacen crecer y dan alternativas a lo caduco y efímero que se vive en sistemas cerrados y longevos.

No son tiempos fáciles. En una investigación religiosa del 2013 en los Estados Unidos revela que el 27% de los norteamericanos católicos que se denominan “activos” descendieron más de 15 puntos desde mediados de la década de 1980. (Pew Research Religion and Public Life Projetc. Pewforum.org). Cosa parecida ocurre en el Brasil, la nación católica más populosa. En 1991 los brasileños católicos constituían el 83% de la población; hoy… apenas el 67%. Se preguntaba el cardenal Claudio Humes: ¿cuánto tiempo más Brasil seguirá siendo una nación católica?”(1 octubre 2011, dici.org). Y no hablemos de todo lo inexplorado y de los cambios vertiginosos en el mundo de la comunicación, la robótica, la genética.

Para recibir el nuevo año debemos tener claridad de la tarea fundamental de todo hombre o mujer con fe en sí mismo y en las fuerzas de la vida: crear el futuro, aprovechar oportunidades, desarrollar sus talentos. Esto el papa lo llama la tarea que un líder debe equilibrar: “la memoria de nuestras raíces, el coraje de enfrentar lo desconocido y comprender la realidad del momento”.

¿CÓMO FORMAR LÍDERES? Unas pistas en medio de tanto mercadeo barato y ofertas sutiles. Usar de las “tecnologías espirituales” nos pueden fortalecer. Entendiendo por tecnología: habilidad. Aprender a ser libre. Liberándome de apegos desordenados, de cegueras que me atan a lo mismo y me impiden ver lo que viene. Solo lo podré hacer si entiendo que me libero de…algo, para sentirme libre para…una finalidad mayor, amar, crear el futuro. Aprender a enfrentar tormentas. Los líderes tienen que hacer discernimientos y tomar decisiones, a menudo en medio de una gran incertidumbre, bajo la presión del tiempo y sin una bola de cristal para ver el futuro. A menudo somos ineficaces para tomar decisiones. Por ello, es vital Aprender de los errores y desconfiar de un mismo. Las intuiciones erróneas no son pecados, el pecado es no reconocer las limitaciones propias, en tener excesiva confianza y no escuchar a otros. Una de las características de un mal líder es ser excesivamente autoritario por la confianza que deposita en sí mismo.

“Ante todo: ¡seamos personas libres!…La Libertad significa ser capaz de pensar en lo que hacemos, ser capaz de evaluar lo que es bueno y lo que es malo, estos son los tipos de actitudes que conducen al desarrollo…Ser siempre libre para elegir la virtud es exigente pero lo convertirá en una persona con una determinación que puede afrontar la vida con coraje”. (Papa Francisco, Discurso a los estudiantes, 7 de junio 2013). ¡BIENVENIDO 2015!

Artículos relacionados

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

×