26 julio, 2024

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En defensa de nuestra historia II

De toda esta marea de comentarios, unos hechos con el hígado, otros hechos con el cerebro; y otros (los menos), hechos con los pies, debemos sacar una lección que nos ayude a progresar como sociedad; que nos empuje a investigar más sobre nuestra historia de tal modo que, con sabiduría, ecuanimidad y generosidad de espíritu podamos reconocer cuando nos equivocamos en aras de que triunfe siempre la verdad y recuperar así el valor de nuestra herencia histórica.

Veo con preocupación y tristeza que muy pocos se toman la molestia de averiguar en que bases documentales nos respaldamos para aseverar todo lo que aseveramos en esta obra y reflexiono sobre el valor de este foro que, de ser útil, debería llevarnos a conclusiones que permitan consolidar el valor de las historias seccionales sin que esto escamotee el protagonismo que, en cada uno de los eventos importantes de nuestro pasado, tuvieran cada una de ellas.

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