La pesadilla de Estados Unidos se desarrolla a la perfección con una impactante historia, sembrando así un hipotético caso de lo que sería un país colapsado.
La distribuida A24 nos trae un drama distópico dando un espaldarazo a los medios de comunicación, y también mostrando un simbólico tributo a certámenes como el World Press Photo, plataforma que expone el dolor con tan solo un poderoso click.
Una de las películas mas esperadas de este año tuvo su estreno hace 4 semanas en cines locales. Civil War, es un road movie (género cinematográfico para referirse a las películas de carretera) bélico dirigido por el cineasta británico Alex Garland, reconocido por crear cintas de ciencia ficción y suspenso como Ex – Machina, 2014, Aniquilation, 2018, Men, 2022 y la mini serie Devs, 2020.
El film se estrenó en Estados Unidos el 12 de abril recaudando en el primer fin de semana $25 millones. Con un presupuesto de 50 millones de dólares hasta la fecha Civil War ha ganado más de $95 millones en todo el mundo, logrando ser la película más taquillera de Garland, y de A24 de lo que va el año.
Sinopsis. En 109 minutos de duración nos sumergen en un futuro cercano donde Norte América está sumida en una sangrienta guerra civil. Para esto un equipo de periodistas y fotógrafos de guerra emprenden un viaje en carretera hacia la capital, Washington DC, para entrevistar al presidente de los Estados Unidos como única misión antes de que las tropas de élite y fuerzas rebeldes se tomen la Casa Blanca.
Con un elenco donde la figura estelar es la experimentada actriz Kristen Dust, la vimos en películas como Vírgenes Suicidas, 1999, Spider-Man, 2001, Melancólia, 2011. Da vida a Lee, una conocedora y avanzada periodista de guerra que tiene el trabajo de retratar la que sería la última foto al presidente. Su compañero de formula, Joe interpretado por el actor brasileño Wagner Moura, Narcos, 2015, es una alma entusiasta que se aferra a todo para obtener la primera información oficial. A la misión se integra una joven intrépida, Jessie, protagonizada por Cailee Spaeny, Priscilla, 2023 que por su curiosidad pone en aprietos al equipo. El actor Jessy Plemons, que tiene un amplio recorrido en películas dramáticas como lo fue El poder del perro, 2021, su rol es trascendental en la trama y dibuja de una acertada manera la imagen de las personas subversivas.
A lo largo del film hay tantos temas en los que se puede profundizar como el rol que tiene el periodismo en asuntos tan puntuales como el respaldo o rechazo a un presiente, también la dictadura de un gobierno fascista en un país desarrollado, la deshumanización ante el dolor cuando el pueblo ataca a su propio pueblo por ideologías políticas, todo esto sumado al hecho de ser retratado por el ojo humano.
Vamos por partes, Gardand no podía hacerlo de una mejor manera, transformar una triste realidad en un thriller haciendo fácil el entendimiento para el público .
Hemos visto películas que tiene temas similares como la clásica Network, 1976 de Sidney Lumet, All the president’s men, 1976 de Alan J. Pakula, Spotlight, 2015 de Tom McCarthy, y finalmente el documental Fotógrafo de guerra, 2001 de Christian Frei, por nombrar algunas, todos muestran el lado crítico, competitivo, vehemente, audaz y sensible de los periodistas.
Cuando se piensa en distopía nos situamos en una ciudad ficticia indeseable para vivir, por eso se puede describir a Civil War como una película que también fusiona la ciencia ficción. Destacando de buena forma que el director gran parte de su filmografía ha retratando situaciones que nos acerca al futuro, una visión aguda para aproximarse a las posibles realidades y sus terribles consecuencias.
Por eso en su nueva película se aplaude el mérito de situar la mirada subjetiva de fotoperiodistas para retratar la angustia. No es sólo la historia de un grupo de civiles que por ideología buscan sembrar el caos y dolor a la constante pregunta ¿De qué partido político eres, derecha o izquierda? se describe en Estados Unidos cómo ¿Republicano o demócrata? Claramente hay una crítica al sistema y al rol fundamental de los medios de comunicación porque deben ser imparciales pero en Civil War enhorabuena están con el pueblo.
El trabajo del periodista y fotógrafo es la idea, el antecedente, la hipótesis y el supuesto ya sea en reflejar un escrito o con una imagen. Por esa razón, Civil War más que un film de exposición ante un hecho es una exploración a los sentimientos y emociones del reportero, del hombre detrás del lente que también sufre, colapsa, no come, no duerme por su sacrificado trabajo que algunas veces es mal remunerado y eso se describe de una manera acertada y con coherencia en el film.
En la parte audiovisual para que todo cobre vida Garland hace uso de la fotografía de forma magistral, ‘’la imagen subjetiva’’ es decir, la fotografía de los protagonistas sujetando la cámara siendo filmados tomando una foto y luego congelando la toma. El significativo trabajo del cinematógrafo, Rob Hardy es capturar el segundo exacto que dan click realzando el rol del fotoperiodista.
El director nos regala una experiencia completa donde el latente sonido nos adelanta a los hechos, gracias a lo crudo de las imágenes se percibe el dolor que también lo vemos en la mirada sin esperanza de Lee, de aquella experimentada fotógrafa de guerra que por ratos se quiebra.
La película es reflexiva, sensible y realista. Vemos a un presidente que se aproxima a ser dictador, que tiene fieles y ciegos seguidores muy cercana a la realidad que vive Latinoamérica. El hecho de situar la historia en Estados Unidos (país que defiende la democracia) nos hace pensar que algo sabe Garland que nosotros no, esa intuición que tienen los artistas al idealizar el futuro.
Civil War es un reflejo de un país en llamas, una oda al trabajo periodístico, una carta directa y una alerta a los malos gobernantes de que la prensa muy aparte de luchar por una premisa siempre tendrán la última palabra de decisión.
