Rocafuerte tuvo cinco poderosas armas: personalidad, oratoria, pluma, cultura y dinero. Supo en qué momentos usarlas. Ellas sirvieron para él ocupar elevados cargos en varios países, difundir su pensamiento liberal e introducir la modernidad en Hispanoamérica
En 1821 desde Filadelfia publicó su primer libro, Ideas Necesarias a Todo Pueblo Americano Independiente que quiera ser Libre. En la introducción escribe: “Amados paisanos míos: no cabe en mi pecho el vivo gozo que experimento al saber que tremola ya el glorioso estandarte de la independencia sobre las risueñas márgenes del caudaloso Guayaquil. Permitidme que desde esta capital de Pensilvania os envíe mi más expresivo parabién, acompañado de los ardientes votos que dirijo al cielo por la felicidad de mi patria, ¿Y en dónde puedo encontrar recuerdos más sublimes, lecciones más heroicas, más dignas de imitación y ejemplos más análogos a nuestra actual situación política, que en esta famosa Filadelfia ? Sí, en esta misma ciudad, asilo de los oprimidos, centro de las luces, baluarte de la Iibertad, el genio de la independencia, venciendo las arraigadas preocupaciones y las ilusiones de la ignorancia, alzó el 4 de julio de 1776 su augusta voz, y con majestuoso acento tan fuerte como el trueno, y tan grato como la armonía del cielo, dijo al género humano reunido: Tiemble la tiranía, húndase en los abismos el monstruo feudal, desaparezcan los falsos y oscuros dogmas de la legitimidad a la brillante luz de las sublimes verdades…” En la obra Rocafuerte se refiere al extraordinario progreso 45 años después de la Independencia de Estados Unidos y critica a los ideólogos de la Revolución Francesa, los llama hipócritas, ambiciosos y monstruos de la humanidad. El libro fue dirigido a los hispanoamericanos: “Si esta es la verdadera marcha del siglo y del entendimiento humano, si la Europa va aligerando sus cadenas […] ¿no sería el colmo de la estupidez que, tratándose ahora entre nosotros, de formar un buen gobierno, nos desentendiésemos de este admirable modelo (se refiere al estadounidense), y nos obstinásemos en preferir las bárbaras, ridículas y mohosas instituciones de la apolillada Europa?”. Su obra es un elogio al sistema de gobierno de Estados Unidos, admiración a sus patriotas y valores de ese pueblo. Este libro tiene como anexo, la traducción al español de la Constitución de los Estados Unidos y un resumen de la obra de Thomas Paine, Instinto Común. Entre quienes recibieron ejemplares fueron los mejicanos Santamaría, Arispe, Victoria y Guerrero, para repartirlos en Méjico. Ellos participaron activamente en la independencia de ese país. En el mismo año publica, Memoria Político-Instructiva; en 1822, Bosquejo Ligerísimo de la Revolución de México, se refiere a los perjuicios de la monarquía causados en sus colonias, censuró a Iturbide y propuso lo que México debía hacer para la unidad de todas las facciones insurgentes, el Plan de Iguala de 1820, no se estaba cumpliendo.
En 1823 escribió el Sistema colombiano que más conviene a la América Independiente, dedicado a José Fernández Madrid, colombiano, médico, poeta y uno de los que luchó por la Independencia de Cuba. En la obra Rocafuerte se refirió a la constitución estadounidense como superior a las demás y llama “imitación hermosa” a la colombiana por ser basada en la estadounidense; la considera superior a la española y francesa y para él puede servir de modelo a los demás gobiernos a establecerse en América Latina. En la obra escribió sobre la importancia de la legislación y republicanismo. Criticó las costumbres heredadas en las nuevas repúblicas como la forma de vestir de las mujeres limeñas que incluyen manto. Afirma: “…este continuo disfraz las predispone a la hipocresía…”. Recomendó la necesidad de cambiar las costumbres en general y a las mujeres obligarlas a andar por las calles con la cara descubierta. Rocafuerte asimiló la cultura política, económica y social estadounidense, deseaba que ella fuera replicada por las repúblicas latinoamericanas. Pocos años después, el francés Alexis de Tocqueville escribió La democracia en América admirando el sistema estadounidense. Esta obra fue traducida a numerosos idiomas y tenía como objetivo hacer cambios en Francia. Para los ecuatorianos las de Rocafuerte quedaron en el olvido. Sorprende que el Banco Central del Ecuador que hizo enorme inversión en publicaciones, no incluyó libros de Rocafuerte.
A 1823, por sus obras escritas además de las que ayudó a financiar a sus colegas, Rocafuerte se había hecho de fama.En la segunda mitad del año hubo una reunión en su casa en Filadelfia,participando José María Salazar, ministro plenipotenciario de Colombia en Estados Unidos y el coronel Leandro Palacios, cónsul general,quienes invitaron a Rocafuerte a liberar Cuba.Otros cubanos radicados en Filadelfia también participaron en el movimiento independentista. En 1826, desde Londres escribió Cartas de un americano sobre las ventajas de los gobiernos republicanos Federativos y en 1831, ya en México, Ensayo sobre la tolerancia religiosa y el mismo año, Consideraciones generales sobre las bondades de un gobierno aplicadas a las actuales circunstancias de la República de México (ensayo).
En Londres conoció a Rudolf Ackermann, propietario de una imprenta, era la más importante en publicar libros en español que se vendían en Hispanoamérica, Rocafuerte apoyó financieramente a los hermanos Joaquín Lorenzo y Jaime Villanueva, quienes desde. esa capital Ackermann publicó Ocios de Españoles Emigrados. Sobre el rol de Rocafuerte en la imprenta de Ackermann, Nicolás Bas en El Libro Español en Londres, escribe:” Más aún si se tiene en cuenta que contó con la protección y el apoyo financiero de Vicente Rocafuerte, uno de los hombres claves en aquel Londres de los emigrados americanos y españoles de los años veinte del siglo XIX. La publicación tuvo fuerte oposición. Lo curioso de la relación de Rocafuerte con los hermanos Villanueva es que estos eran clérigos y Rocafuerte, masón. Rocafuerte también cubrió parcialmente la edición de su Vida literaria, la obra de Pradt, Concordato de México con Roma. Lo mismo hizo con Canga Argüelles, colaborador de los Ocios en materia de Hacienda, al apoyar la edición de los Elementos de la ciencia de hacienda. Religión, educación, hacienda eran todas ellas materias que interesaban a Rocafuerte para el proyecto mexicano y también continental de una América independiente.
En 1830 publicó, Ensayo sobre el nuevo sistema de cárceles, Le vendría muy bien al poder judicial y ministro del Interior de Ecuador leer esta obra. Escrita hace casi 200 años, Rocafuerte describe al Ecuador actual. Desde México, en 1831 publicó Ensayo sobre la tolerancia religiosa, no estaba de acuerdo en que solamente se practicara una religión en Hispanoamérica, ni que el Vaticano ejerciera enorme poder en la región. Le costó un juicio y estuvo próximo a ser encarcelado. En el mismo año escribió otra obra de tema religioso con un título extenso: Observaciones sobre la carta inserta en el registro oficial del 4 de octubre del célebre obispo Fletcher sobre la ilicitud de los matrimonios entre católicos y protestante. En México se quería prohibir el matrimonio entre católicos y protestante y en 138 páginas presenta argumentos para probar lo equivocado que sería prohibirlo, remontándose al siglo XVII. También publicó ensayos en contra de Lucas Alamán, poderoso político mexicano, le costó la cárcel.
Mientras vivió en Cuba escribió en el periódico El Argos y cuando desde Londres regresó a México, fundó el periódico El Fénix de la Libertad y escribió en él para hacer oposición al gobierno. Otros pensadores liberales también escribieron.
En no todos los libros escritos por Rocafuerte aparece su nombre; en unos usa anagramas y seudónimos: NORAAJEB (anagrama de Bejarano), José Bejarano, apellido de su madre, TERACROUET (compuesto de Roca-fuerte); también el seudónimo Un Americano. Posiblemente hay obras de Rocafuerte que todavía quedan por descubrir.
qué artículo más docto e interesante el de Guillermo Arosemena