26 julio, 2024

La presencialidad educativa

La presencialidad educativa es más que urgente, para la vida humana de niños y adolescentes del mundo, que estos dos años de la tan trágica pandemia del COVID-19, han dejado de ir a las escuelas y colegios, a recibir educación.

Y hago énfasis en decir educación, que significa todo un conglomerado de acción humana-científica, en que, a más de recibir solo conocimientos, que pueden dárselos por vía electrónica, no llenan el cometido de su significado que es de formación.  Y para ello vale desde un gesto, una sonrisa o contrariedad de su maestro, como aprobación o no de su accionar, en su fase formativa; como la de sus padres en el hogar, en los momentos de crecimiento, dentro de un órden establecido por ellos.

¡Atención autoridades educativas gubernamentales! ¡Basta ya de la asistencia voluntaria! la cual ha sido nefasta para los alumnos de todas las secciones escolares y colegiales. 

Los maestros deben estar ya listos y decididos a recomenzar esta etapa suspendida hace dos años, que trajo consigo en la mayoría de los alumnos el nomeimportismo al aprendizaje y más aún a la exclusión de la educación en sus vidas.

Por lo que ¡Maestros y alumnos! vacunados ya y guardando todas las normas asépticas: ¡Marchad de frente! Para volver a las aulas y patios de sus escuelas y colegios: vistiendo sus uniformes respectivos y maletas al hombro con sus libros y cuadernos, a recomenzar la tan valiosa vida estudiantil. 

Sabiendo sobre todo, que el trabajo “de rescate” será muy fuerte, necesitando esfuerzo de los dos lados, maestros y alumnos, respaldados por los padres, conscientes de la valía de la educación en la vida de sus hijos. 

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