Mensaje final
¡Mujer!: respétate, estímate, dignifícate, valórate, no te desprecies, no te cosifiques, no te materialices… y serás respetada, estimada, dignificada, valorada y apreciada. Para valer no tienes que hacerte hombre, en el lenguaje, la musculatura, las artes marciales, la halterofilia; no te pintes como Cobra, no quieras parecer fuerte como Rambo, no te degrades como luchadora… No seas machista sobrevalorando al hombre y depreciándote a ti misma, denigrando en ti misma a la mujer. No cometas el error de ascender por los valores propios del varón (la fuerza, la dureza, la bravura) para encumbrarte como mujer; asciende por la escala hermosa, fuerte y segura de tu feminidad; de aquello que te es propio: