Luego de que el paÃs viviera semanas de intranquilidad y tensión en el aspecto polÃtico, la calma ha retornado por lo menos momentáneamente para los ecuatorianos. La elección de las principales dignidades de la Asamblea y el Informe a la Nación dado por el Gabinete el 10 de Agosto, trajo consigo el observar escenas que hubiésemos pensado que ya no existÃan.
El receso de la Asamblea ha generado una tregua entre los partidarios de la Revolución Ciudadana y quienes están opuestos a ella. El tratamiento de Leyes que quieren implementarse para consolidar los cambios que traen consigo el Socialismo del Siglo XXI, crean momentos polémicos y espinosos con debates entre quienes las plantean y los que se contraponen. La integración de las Comisiones con seguridad traerá nuevos enfrentamientos, no obstante el Gobierno consolida su mayorÃa en base a componendas.
La CALMA se siente en Carondelet; la ausencia del Presidente Correa con motivo de sus vacaciones en tierras belgas, hacen que la abultada burocracia también holgazanee. La delegación al Vicepresidente no se hace sentir ya que el CÃrculo continua ejerciendo su influencia aun sin su lÃder., pero igual en el paÃs se siente la CALMA.
Pero aquella CALMA que se experimenta en lo polÃtico, se ve cada vez mas alterada por las victimas que va cobrando la delincuencia y el sicariato. La policÃa anuncia una vez más un plan para combatir la corrupción, creando nuevos grupos que implementen operaciones de inteligencia buscando disminuir la violencia imperante en el paÃs, trabajo cuesta arriba por los continuos ataques a su personal por el 30-S.
La restructuración judicial a cargo de la Judicatura de Transición empieza a generar anuncios de disconformidad y conforme el tiempo se acorte ira creando a nivel del paÃs mayor desconfianza, aquà la CALMA presagia tormenta. Se espera el retorno del presidente para meter las manos en la justicia.