25 junio, 2025

Falsas acusaciones

Las víctimas de falsas acusaciones han tenido que pasar injustamente largos años en las cárceles; incluso, les ha costado la vida, como el célebre caso de Sacco y Vanzetti, en Estados Unidos. Se los acusó falsamente de robo a mano armada y asesinato, fueron juzgados y sentenciados a morir en la silla eléctrica (1927). Se dice que el juez del caso le dijo al jurado: «Este hombre —Vanzetti—, aunque no haya en realidad cometido ninguno de los crímenes que se le atribuyen, es sin duda culpable, porque es un enemigo de nuestras instituciones».

Otro caso famoso es el del capitán francés Alfred Dreyfus, que fue acusado de traición a la patria. Condenado a degradación y deportación perpetua a la Isla del Diablo. El novelista francés Émile Zola escribió Yo acuso, el artículo más famoso en la historia del periodismo: «Es mi deber: no quiero ser cómplice. Todas las noches me desvelaría el espectro del inocente que expía a lo lejos, cruelmente torturado, un crimen que no ha cometido». Dreyfus fue declarado inocente y reincorporado al ejército.


Marie-France Hirigoyen, terapeuta francesa, investiga y escribe sobre temas de psicología jurídica. Vale la pena transcribir algunas ideas de sus importantes publicaciones:

«Un individuo perverso podrá acusar de actos que no ha cometido a una persona a la que quiere descalificar».

«En los perversos, las decepciones producen ira o resentimiento, y un deseo de venganza. Cuando un perverso percibe una herida narcisista (una derrota o una repulsa), siente un deseo ilimitado de obtener una revancha. No es una reacción pasajera, sino de un rencor inflexible».

«El tipo de falsas acusaciones totalmente inventadas son producidas por lo general por mitómanos, capaces de imaginar y crear una historia de robo, atentado al pudor o violación, acompañada las más de las veces por la correspondiente ‘escenificación’. Pueden ‘revelar’ o no la identidad del ‘agresor’. Al no hacerlo, pretenden rodear la historia de un halo de misterio que satisface más su vanidad morbosa».


La doctora Diana Salazar, al poco tiempo de asumir como fiscal general de la Nación, se encargó de la acusación del caso Sobornos contra Rafael Correa y otros de sus colaboradores cercanos. La sentencia fue de ocho años de cárcel por cohecho. Desde entonces, la fiscal ha sido perseguida implacablemente por Correa, quien afirma que fue sentenciado sin pruebas. El correísmo y sus corifeos han tratado de buscar todo tipo de argucias, incluso promoviendo un juicio político para destituirla, sin éxito.

Fue acusada de haber plagiado la tesis de su doctorado, pero el Consejo Universitario de la Universidad Central del Ecuador determinó que el texto era de su autoría. Intentaron doblegarla a través de las redes sociales y ejércitos de troles bien pagados. Cobarde y miserablemente, le aplicaron el racismo, denigrando en forma despiadada su condición de mujer afroecuatoriana.

Su trabajo en la Fiscalía fue incansable y de altísimo riesgo. No se amilanó en los casos que demostraron la infiltración del poder político, económico y del crimen organizado en distintos niveles de la justicia: Independencia Judicial, Metástasis, Purga, Plaga y Pantalla.

Internacionalmente, se reconoció su firmeza y valentía. En 2021, el gobierno de los Estados Unidos la galardonó con el Premio Internacional a los Campeones Anticorrupción. También recibió otros reconocimientos, como el otorgado por la revista estadounidense Time, que la ubicó entre las 100 personas más influyentes del mundo.

Al culminar los seis años por los que fue nombrada fiscal general de la Nación, la doctora Diana Salazar ha recibido el reconocimiento y gratitud de la mayoría del pueblo ecuatoriano, y el presidente Daniel Noboa ha tenido el acierto de nombrarla embajadora de nuestro país ante la Nación Argentina.

Al culminar su gran tarea, la doctora Salazar, con justa razón, ha señalado:

“Los mafiosos no me perdonarán haber desmantelado sus redes criminales ni haberlos desenmascarado”.

1 comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos relacionados

×