19 abril, 2024

¿Orgullo, vanidad o incapacidad?

Por alguna razón que, solamente los Psicólogos pueden explicar con la capacidad suficiente para que no sea cuestionada, cuando el ser humano alcanza un cierto nivel de éxito da rienda suelta a sus instintos y hace evidente su orgullo, suficiencia o vanidad, que alimentados por su ego lo convierte en un ser que se cree privilegiado y elegido por los Dioses, para hacer las cosas como mejor le parece.

Por otro lado, si el escenario es político, la burocracia busca, investiga y encuentra, las debilidades que todos tenemos, con el propósito de comenzar a atacar furtivamente, para mantener sus privilegios o para estar cerca de las eventuales oportunidades. En eso los funcionarios públicos son cortesanos expertos, aunque dejen mucho que desear en el ejercicio de sus funciones. Están dispuestos a hacerse cargo del maletín del ungido, tener el cigarrillo a la mano, el fósforo, las frases acarameladas que alimentan su ego, etc. Este es el mundo de la impudicia que rodea a la función pública.

La Presidencia de la República y los más altos cargos de los otros poderes del Estado no son la excepción, lo que lleva a la conclusión, si la premisa que propongo es cierta, que quienes manejan el aparataje del Estado son los mandos medios y si se los quiere identificar mejor, los funcionarios de carrera, de alto nivel.

Si se toma conciencia de esta realidad y si el propósito de la función ejecutiva es el de gobernar para mejorar las condiciones del país se debe contar con un equipo de profesionales idóneos, expertos y honestos que cumplan con las ofertas y los programas de gobierno.

Pero resulta que en la realidad actual, no se cuenta siquiera con un plan de desarrollo y de gestión para los cuatro años de gobierno, no se diga un plan maestro a 10 años plazo.

Al no contar tampoco, este Gobierno, con profesionales que puedan implementar ese programa, se improvisa con profesionales sin experiencia y/o se mantiene a funcionarios de gobiernos anteriores que, expertos en el halago, en el arte de pasar desapercibidos y no hacer olas hasta que pase el peligro de su despido, vuelven a la carga. También hay los reciclados, supuestamente juramentados que son fieles al gobierno actual. “Bullshit” como dirían los gringos.

Habemos personas que hemos sobrepasado la etapa de persecución de objetivos materiales que otorgan estabilidad y seguridad a nuestras familias, pues ya lo hemos logrado y habiendo adquirido experiencia

profesional y de vida, debemos arrimar el hombro para mejorar las condiciones de vida de la comunidad más desvalida.

Ese es mi caso y por eso he tratado de llegar con más de un proyecto de desarrollo integral de comunidades indígenas, montubios y cholos, que han sido propuestos como proyectos alternativos de tesis en mi carrera de Phd. en proyectos, ahora suspendida, que implica mejorar las condiciones de vida y la incorporación de esas poblaciones en el área de telecomunicaciones, información pública, programas educativos, formativos, salud, desarrollo, agricultura, integración comunitaria con infraestructura y comercialización agrícola, etc. ¿Saben una cosa? A nadie le ha interesado.

Pero aterrizando en el momento actual de crisis por la que atravesamos, me permito sugerir la integración de Consejos asesores ciudadanos, con acceso a la presidencia de la república e integrados así y liderados por las Universidades o las Cámaras de la Producción:

1.- Delegados de todas las universidades y de los colegios de abogados a nivel nacional, para que analicen y propongan alternativas de solución viables y constitucionales a la crisis.

2.- Ex ministros de finanzas/economía y representantes de las Universidades, colegios de economistas y de ingenieros comerciales.

3.- Ex ministros de Gobierno/Interior, Defensa y representantes de las Fuerzas Armadas y Policía, ex miembros de los servicios de inteligencia.

4.- Ex funcionarios de Planificación y Desarrollo y Profesionales no vinculados al actual gobierno para que elaboren un plan maestro de desarrollo con aplicaciones a corto (3 años) y largo plazo (10 años).

El resultado de ese trabajo deberá ser analizado por el equipo de gobierno de la presidencia y el Presidente dispondrá de su aplicación o no.

Si la crisis no tiene solución viable, si está consciente de que el país necesita una reforma integral, señor Presidente y si desea el bien y una salida requerida para su pueblo, implemente la muerte cruzada y gobierne por 6 meses con Decretos Presidenciales. En este período, consulte al pueblo si se reemplaza la actual constitución por la del año 1.998 y estructure la consulta con otras preguntas que a su juicio deben recaer sobre la voluntad del pueblo. Recuerde que el Poder Judicial, la Asamblea, el CCPCS y el CNE están contaminados y que usted tiene las riendas del poder y la decisión de dejarse ayudar para ayudar al pueblo ecuatoriano.

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1 comentario

  1. Excelente propuesta.
    Sabemos que en equipo se trabaja mejor. Dos cabezas piensan mejor que una. Felicitaciones Señor periodista por su pensamiento crítico.

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