No es percepción

Me siento muy triste por no haberme equivocado con mis deducciones, claro que fueron resultados fáciles que provienen de que a iguales ingredientes y comportamientos iguales resultados. Vamos de mal a peor. Voy a estipular varios puntos que puedo ampliar demostrando el intenso estudio que me han llevado a mis aseveraciones.

El Presidente Correa debe pensar que sólo él y su círculo son los iluminados, y que los demás somos agnósticos. Prueba de ellos son sus monólogos sabatinos en los que constantemente pregunta “¿no es verdad?” a manera de ver si estamos cayendo en sus hábiles usos de la demagogia.

Tan es así que cuando a la Ministra Coordinadora de la Producción, Nathalie Cely, se le preguntó cuánto de político tenía el anuncio del presidente Rafael Correa, del incremento desde enero del salario. Ella, una profesional, no pudo esconder su contrariedad, porque son pajaritos en el viento. Esa es la engañosa propuesta del ‘salario digno’, una de las perlas cultivadas por Correa ya que no existe ese término en ninguna parte, ni siquiera como expresión técnica del arte de la economía. Ese fue otro gran enredo del “Presidente”.

Pasemos ahora al “comunismo” o póngale el nombre que quiera juchimacuchi, socialismo siglo XXI –más apropiadamente “sapada” del siglo.

El Comunismo es: “Doctrina que propugna una organización social en que los bienes son propiedad común. … Doctrina formulada por Karl Marx y Friedrich Engels, teóricos socialistas alemanes del siglo XIX, y desarrollada y realizada por Lenin, revolucionario ruso de principio del siglo XX, y sus continuadores, que interpreta la historia como lucha de clases regida por el materialismo histórico o dialéctico, que conducirá, tras la dictadura del proletariado, a una sociedad sin clases ni propiedad privada de los medios de producción, de la que haya desaparecido el Estado. Que novedoso para el club de amigos que pretenden “Convocar a la Internacional Socialista” (que diplomáticamente les dijo que están locos) saber que deben desaparecer, no fortalecerse y mamar como ternera recién parida de la pobre vaca que han endilgado a ser al pueblo.

Karl Marx escribió su manifiesto comunista a mitades del siglo diecinueve, un momento fascinante en la historia humana. La revolución industrial creaba una sociedad que cambiaba radicalmente y rápidamente. Siempre en su intención estaba dirigida a los estados en mayor evolución y capacidad económica, no para pueblos paupérrimos. El problema con la visión de ingeniería social grandiosa de Marx es que asume que los seres humanos jugarán por las reglas que están contra su naturaleza y que una economía, que es o desea ser grande, es bastante simple manejarla centralizadamente, absorbentemente. El comunismo (o socialismo desvirtuado) sigue una clase torcida de lógica que no se aplica. Los seres humanos no trabajarán tan arduamente sin un interés propio para motivarlos; además, todos tenemos muy en claro que: El mando absoluto corrompe absolutamente, incluso en las manos de un hombre benévolo.

Ahora bien tomemos nota que la información es el conocimiento; desarrollo este punto: Cuando uno va a la escuela, colegio, universidad… busca informarse del camino que han seguido otros, sus análisis y sus descubrimientos; entre mejor sea la instrucción mayor será las alternativas de pensamiento y los resultados que de ellos derivaron, por eso el ejercicio desinformador debe actuar como una pinza en los dos polos: Estudios e Información por cualquier medio.

Es absolutamente indispensable para permitir el camino de los dictadores eliminar todo signo de información libre los medios estatales pueden decir y hacer lo que les place, como ya se ve. Para muestra un botón: El Célebre Templo de la Verdad, diario El Telégrafo, desde que cayó en manos del Estado se permite barbaridades que ni los pasquines utilizarían… y ya que estamos en ese tema ¿No le fue pedida la renuncia al Director por su jefe, la actual Ministro de Finanzas? Y el “Presidente”, sin cortesía alguna hacia ella la desautoriza y ratifica al fiel borrego ¿Estamos? Nada será “kosher”, nada será puro, nada será bueno, que no sea lo proyectado con el adoctrinamiento de conveniencia del dictador.

El Lic. Panchana cuando ejercía su profesión, y no se envanecía, era un fuerte representante del gremio y exigía el derecho a informar y ser informado. Hoy salta el Proyecto de Ley conocido como: El Panchanazo, la impresión es que lo han usado preconizando su ego, busca crear un elemento represivo -nótese bien que no me opongo a uno normativo de buena fe.

Nuestro derecho a tener y comparar la información es la que garantizará nuestra libertad.