28 marzo, 2024

Arar, Sembrar…

Pensamientos de un Peatón 

Debo presentar mis disculpas a quienes han sido fieles seguidores de estos modestos  escritos. Me fueron necesarios unos meses de reflexión para decidir que la desaparición de Diario El Telégrafo, hoy un recuerdo cuya malhadada copia no merece ser tomada en cuenta ni para anécdota, era el aliciente que requería para defender nuestras ideas.

Es así como caminando por veredas y boca calles pensamientos dispersos acudieron a nosotros. A titulo de ejemplo: la peninsular provincia nació, no por los logros de sus mediocres autoridades, sino por la aristocrática visión que ciertos guayaquileños asumen frente a los problemas diarios. Fácil es acusar a terceros de los males que nos aquejan antes que aceptar, que nuestros errores son la causa de los fracasos.

Carentes de liderazgo asumimos todos y cada uno el mando, nadie quiere ser soldado pues todos somos generales. Con ello el enemigo puede crear cizaña: Carlos ataca a Paco, Enrique destroza a Marta, Margarita saca a relucir las veleidades de Antuco mientras su Majestad cosecha resultados. Es que SAI gusta de la confrontación, necesita de ella, vive en dicho caldo de cultivo sin la cual; muere en el anonimato.

Que es su voluntad que todos pasen por un puente: que lo hagan. El caos que de dicha decisión se derive será su problema. Que debe haber loterías provinciales, cantorales, parroquiales o palaciegas; pues tiene razón ha crearlas no mas. Claro que  quienes compramos la de la JBG lo hacemos por el destino, buen uso del dinero y credibilidad. Que con ello será necesario limitar sino eliminar la atención de afuereños, lamentable pero predecible.

Que regresemos al oscurantismo que determinadas alcaldías nos llevaron acumulando basura por montones, urinarios en cada poste, falta de agua, ineficiencia eléctrica pues otorguemos ese derecho a quien ni los USA., peor aun las europas le entraron. Aparentemente eso causa un inmenso placer al monarca de turno. No se preocupe, quienes no aceptamos aquello pues emigraremos a otros países. Ahora que lo pienso esta bien que regresen los ecuatorianos de España o USA., ya que así muchos de nosotros encontraremos plazas de trabajo.

Un sabio Samurai replicaba a sus discípulos ofendidos por su pasividad ante las injurias de un prepotente adversario con el siguiente comentario: Si alguien llega a ustedes con un presente y no lo aceptan… ¿A quien pertenece dicho regalo?… Al que intento entregarlo contesto un discípulo… Lo mismo vale para la envidia, rabia y los insultos – dijo el maestro – Cuando no se aceptan, continúan perteneciendo a quien los llevaba consigo.
 
Arar es preparar la tierra… Sembrar es colocar la semilla de la esperanza… En tanto que Cosechar es el fruto resultante de la preparación y la siembra.

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(c) por Ben Heine - Flickr

El resultado, que no podía ser otro, fue que la nobilísima actividad política fue siendo cada vez más subestimada y subvalorada y quedando cada vez más en manos de improvisados y de personas de menor preparación y hasta de personas de ninguna preparación más allá de algún título de bachiller, (en algunos casos logrado al apuro, entre gallos y media noche), y algún eventual título de alguna universidad local, cuya obtención, bien sabemos, no es nada difícil. A los ignorantes ciertamente, se les unieron pronto los inmorales y el círculo se fue cerrando cada vez más.

Si se quiere ahondar en esta análisis, podemos preguntarnos cuáles han sido los últimos líderes de proyección nacional que ha tenido o tiene el país, y veremos que han sido, a no dudarlo, Bucarám y Correa. El uno nacido en 1952 y el otro en 1963. En buen romance, a partir de la década de los años sesenta, ya no nacen líderes en este país. Y no cabe aceptar tampoco el pretexto de que los últimos líderes históricos de los partidos llamados tradicionales, (denominados “partidocracia” por los demoledores del viejo orden), eran demasiado “fuertes” e impidieron el surgimiento de nuevas figuras; no cabe aceptarlo, digo, porque basta revisar nuestra historia y encontrar infinidad de casos de líderes surgidos precisamente de la lucha, (¡ había voluntad de lucha ¡), entre jóvenes figuras, luego convertidos en líderes, contra viejos líderes de cuya fuerza nadie puede dudar.

La santa inquisición

Los hechos demuestran que en los cientos de años comprendidos entre el 1200 DC y el 1900 murieron cientos de miles de personas; así como otros tantos fueron torturados y se cometieron barbaridades en las cuales se procedieron incluso a raptos de niños en nombre de Dios. La santa inquisición se convierte en el centro del odio y la motivación esencial del repudio a la Iglesia Católica, porque era la manera de oprobiosamente controlar al hombre por parte de un supuesto poder superior. Maneja la publicidad y una aureola de verdad incuestionable. El que se oponga a la Santa Inquisición corría peligro de muerte.

Los extremos de la verdad propia, que no admiten la posibilidad de la equivocación llevarán a la vivencia de extremos en los que lo primero que peligrara será la libertad, porque es necesario acallarla para hacer brillar su supuesta única verdad, la del santo inquisidor, caudillo, o llamase como quiera autocalificarse el detentador del poder que utiliza los métodos de esa oprobiosa institución para hacerse de los absolutos poderes, manejando la verdad, diciéndola a medias o creándola a la conveniencia para en su nombre, hacer vivir a los pueblos en la norma que considera correcta…

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