La muerte de Omer
Hace unos días mientras observaba un noticiero, me sorprendió una nota en la que se describía pormenorizadamente uno de los tantos asaltos con asesinato que se producen en Guayaquil convertida en tierra de nadie. El hampa, narcotráfico y el sicariato tienen sentadas sus bases en la ciudad.
El hecho de sangre se dio como tantos otros en la Vía Perimetral, arteria que en determinados sectores es el escenario para que la delincuencia pueda ejecutar sus fechorías a plena luz del día. La víctima, un ciudadano chileno-ecuatoriano que junto con su nieto se dirigían a efectuar un depósito en un banco producto del dinero recaudado en su negocio en Parques California.