20 abril, 2024

En memoria de nuestro columnista Henry Raad Antón. Paz en su tumba

Henry Raad Antón; abogado, empresario y escritor, falleció este martes 7 de abril a la edad de 79 años.

La noticia de su deceso la publicó su familia a través de su cuenta de Twitter.

Paz en su tumba.

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El odio entre los ecuatorianos.

Uno de los objetivos nacionales de cualquier gobierno es la paz. Nada tienen que ver en este logro, la ideología política o la tendencia económica de quien ostenta el poder.

El mayor patrimonio de un ciudadano es su libertad y la tranquilidad social.

El ecuatoriano quiere vivir en un clima de bienestar para trabajar sin sobresaltos, agresiones o escándalos.

Solo las personas que tienen odio en sus entrañas, pueden odiar a los demás y hacer que estos se odien entre sí.

El odio es un sentimiento dañino que genera grandes sufrimientos. El que lo sufre vive un infierno corroído por las más bajas pasiones. El odio casi siempre es resultado de las frustraciones, envidias o complejos adquiridos en la infancia. El que odia se levanta diariamente solo para preguntarse contra quién debe pelear. Las razones de dicho pleito no son importantes en comparación de las ganancias personales que consiga del conflicto.

La incertidumbre

Puede ser que la primera impresión que tiene un niño al nacer sea la de la abundancia del mundo que va a habitar, por eso su llanto por que nunca podremos con tanta majestuosidad del mundo que habitamos. Es por ser un mundo tan vasto e intenso es que en el transcurrir de existir se convierte en un valle de lágrimas, por que no podemos con él. No podemos con todo el aire, con toda el agua, con todas las montañas, elevar la mirada es admirar el infinito frente a nuestros ojos. No tenemos tiempo para vivirlo y sumergirnos todo lo que somos en su inmensidad, la totalidad de lo que nos rodea. La impotencia es propia de nuestra naturaleza y es un motivo que nos permite estar aquí, ahora, desde el pasado hasta lo que viene y vienen. En la naturaleza nada es pobre ni miserable, esas son consideraciones de poder del hombre, etiquetas de dominio, pero la naturaleza en si no domina nada, todo es suelto y conectado a su fuente, a su igual. Todos tenemos un espacio y podemos convivir y fraternizar, podemos llevar una existencia que nos acerque al bien y existir pacíficamente, ese es el ideal sin embargo aparece el conflicto. No hay épocas de la historia en que no recordemos el conflicto, la dificultad, esta es nuestra primera aceptación como una aptitud ante el vivir: el conflicto, el padecer, el sufrimiento tanto que al final de nuestra vida el mayor conflicto es aceptar que tenemos que morir o mejor escrito: vamos a morir.

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