25 abril, 2024

¿Bolívar, visión militar o de estadista? Opinión de Rocafuerte

Simón Bolívar soñó con liberar países de América española y después de mucho sacrificio lo hizo realidad, ganó numerosas batallas e independizó cinco países. Estaba consciente de que su misión no debía limitarse a triunfos militares, su responsabilidad final era organizar las estructuras del Estado y dejar sentadas las bases de la institucionalidad. Bolívar quería dejar un legado de repúblicas prósperas que inspiraran respeto en el concierto mundial. Mostró admiración por la Constitución de Estados y su forma de gobierno, estuvo en contacto con Henry Clay legislador y secretario de Estado de Estados Unidos para instruirse sobre cómo funcionaba su gobierno y Jeremy Bentham, jurista inglés y constitucionalista más famoso de los países anglosajones, para solicitar sus libros y las leyes escritas por él que adoptaron los gobiernos de Inglaterra y Estados Unidos. Fue tan gran admirador de Bentham que le escribió el deseo de ser su discípulo. Bolívar falleció cuando la Gran Colombia  se encontraba en caos. Seguramente en los últimos días antes de expirar se preguntó: ¿Qué sucedió? ¿En qué fallé? ¿Tengo responsabilidad sobre esta anarquía?¿Por qué quedaron en letras muertas mis cartas con Clay y Bentham? A continuación se tratará de encontrar explicación a errores cometidos que casi dos siglos después siguen repercutiendo en nuestros países.

Frecuentemente se compara a Bolívar con George Washington, por ambos haber sido libertadores, pero no comparto ese criterio. Washington fue el primer presidente de Estados Unidos, pudo haber sido reelegido en más de una ocasión, pero creyó en la alternancia y se retiró a sus haciendas donde lideró la construcción de canales, fueron las primeras autopistas de esa gran nación. Una mejor comparación es con Alejandro Magno; en lo militar y político tuvieron vidas muy similares. Alejandro fue extraordinario militar. Persiguió a Dario y se apoderó de Persia, el más grande imperio de su época; posteriormente conquistó numerosos territorios; permanecía poco tiempo en una región y pasaba a conquistar otras hasta apoderarse de la India. Quería continuar guerreando pero sus generales se negaron a seguirlo, para ellos ya era tiempo de regresar a Macedonia. Al retornar a su tierra, tuvo oscura muerte en Babilonia, había recorrido más de 30.000 kilómetros y se adueñó de 16 reinos. Logró su enorme imperio en 15 años y por no haberse consolidado, sus generales se enfrentaron entre sí, apoderándose cada uno de parte del Imperio. Bolívar siguió el mismo camino; se pasó guerreando un tiempo ligeramente superior al de Alejandro, no permaneció mucho tiempo como presidente de Colombia, continuó independizando otras regiones y acabando con rebeliones en países independizados. Antes de Bolívar fallecer sus hombres de confianza comenzaron a pelearse por el poder  y lo continuaron haciendo después de enterrarlo. Su sueño de la Gran Colombia quedó en sueño. Para Ecuador fueron años desastrosos. 

Simón Bolívar es descrito como un superhombre, héroe de proporciones épicas lleno de hazañas extraordinarias. ¿Cómo era Bolívar? ¿Cuál era su personalidad, su filosofía sobre la Independencia? Según él ¿qué clase de gobierno debían tener las repúblicas liberadas, metas y planes para el futuro de ellas? En libros escritos mientras Bolívar vivía o pocos años después de morir, sus autores describieron a Bolívar, su físico, forma de vestir y hablar, defectos, gustos y pasiones, incluyendo la controversial vida privada.  Ellos coincidieron que fue genio militar, soñador por excelencia, tomador de grandes riesgos, audaz, ambicioso, enorme capacidad de trabajo, carismático convencido de ser ungido para la salvación de América Española, controversial, enorme ego, etc. Los autores que lo conocieron y escribieron sobre él, lo hacen con más objetividad que los posteriores. Reconocen sus méritos pero señalan las debilidades; lo critican por la forma como quería conducir la construcción de los nuevos Estados. Es muy escasa la bibliografía de Bolívar como estadista. Su legado fue Gran Colombia que en ocho años de existencia no había podido construir cimientos. Así como Alejandro, Bolívar no consolidó ninguno de los países independizados. Gran Colombia  se hizo al andar y dejó convulsionada una región que después de cerca de 200 años de independizada sigue estándolo, al extremo de que los países que la conformaron están a partir del puesto 72 en el ranking de los países fallidos. 

Gran Colombia fue el sueño de Bolívar, pero él mismo no contribuyó a hacerlo realidad. Fue teórico, sus discursos estaban llenos de principios democráticos y liberales, sin embargo no pudo convertirlos en realidades; quizá porque con los años, comenzó a darse cuenta que los pueblos liberados por él, no estaban preparados para ser repúblicas. Atrás fueron quedando leyes modernas, sólido estado de derecho, estabilidad social, política y económica. Seguramente el cambio de actitud lo llevó a ordenar la redacción de la Constitución en Bolivia nombrándose Presidente Vitalicio. Se había  convencido de que las sociedades de los países que había liberado, por haber estado moldeadas durante siglos a un régimen colonial, corporativo, esclavista y estamental, no estaban en condiciones de gobernarse, por no estar preparadas para la democracia. La meta de construir la gran nación fue quedándose en sueños. ¿Qué pensaban personas que lo conocieron o vivieron durante su época? José María Samper, en su obra Apuntes para la historia  publicada en Colombia en 1858:“… la resolución que tomara Bolívar de volver al ejercicio del Poder Ejecutivo, tan funesta para su gloria como aciaga para la República. […] el ídolo de los colombianos, el símbolo de las glorias nacionales y el orgullo de los veteranos de la libertad, había degenerado tan visiblemente, merced a la obcecación de su espíritu, descaminado por la lisonja y la ambición, que su nombre parecía la personificación del despotismo y su poder se hacía cada vez más insoportable odioso”. William Tudor, Cónsul de Estados Unidos en Perú, en carta del 17 de Mayo de 1826 al Secretario de Estado: “La profunda hipocresía del General Bolívar ha decepcionado al mundo y a la mayoría de sus antiguos amigos quienes lo han abandonado al descubrir sus verdaderas intenciones. Con la violenta disolución del Congreso se le ha caído su máscara…” 

Rocafuerte quien admiraba el sistema de gobierno estadounidense y escribió libros sobre la importancia de que las nacientes repúblicas lo adoptasen estuvo en desacuerdo con Bolívar sobre la nueva forma de gobernar que quería imponer. Rocafuerte se opuso al centralismo que Bolívar quería, en vez de crear provincias para que cada una tuviera su propia autonomía. En carta del 27 de Septiembre de 1826, Rocafuerte escribe a Bolívar para tratar de hacerlo cambiar de opinión. Le comenta haber oído que en Colombia había apoyo para crear la federación compuesta de Venezuela, Cundinamarca y Quito. Esta división sería fatal porque cada sección ser lo suficientemente grande para debilitar al Gobierno central e incluso aspirar a la independencia. Le sugirió que sería mucho mejor dividir la república en doce provincias de acuerdo a la geografía y condiciones locales. También le recomendó la necesidad de mejorar las instituciones políticas y hacer la transición del centralismo al  federalismo para poder ponerse a la vanguardia de la civilización. Finalmente le advirtió que como hijo de la libertad su responsabilidad era establecer la libertad en una manera apropiada al siglo en que vivían. 

 

Por ignorarse el sistema de gobierno federal perseguido por Rocafuerte, otros guayaquileños y peruanos, hubo protestas y enfrentamientos, como sucedió en 1827, cuando en Lima ocurrió una sublevación que perseguía la creación de un Gobierno federal; los guayaquileños se adhirieron. Sobre este evento, Bolívar en una carta del 24 de Agosto al Presidente del Senado de la Gran Colombia mostró su ira: “…ha favorecido el voto de algunos imprudentes que desde el año pasado trabajan en Guayaquil por dar aquella forma a nuestro Gobierno, y a los cuales procuraré yo contener […] mi decisión por un Gobierno central más adecuado a nuestras necesidades” Otras cartas de Rocafuerte a Bolívar entre 1826 y 1828 tienen fuertes expresiones acusatorias hacia él. En una de ellas le advirtió: “…su conducta es alarmante para las libertad y bienestar de las otras repúblicas de la América Española… En su delirio de ambición bien podría ofrecer a Colombia en su transacción maquiavélica, mientras sea reconocido como rey o presidente vitalicio de Colombia”. Este último tema se refirió a ayudar a España para nuevamente tomar control de México. Otro caso: Rocafuerte debió conocer sobre una carta que Bolívar envió desde Jamaica a Maxwell Hyslop, poderoso empresario inglés proponiéndole financiar su revolución y a cambio recibir Panamá y Nicaragua: (…) Ventajas tan excesivas pueden ser obtenidas por los más débiles medios: veinte o treinta mil fusiles; un millón de libras esterlinas; quince o veinte buques de guerra; municiones, algunos agentes y los voluntarios militares que quieran seguir las banderas americanas (…) Con estos socorros pone a cubierto el resto de América del Sur y al mismo tiempo se puede entregar al gobierno británico las provincias de Panamá y Nicaragua, para que forme de estos países el centro del comercio del universo por medio de la apertura, que rompiendo los diques de  uno y otro mar, acerque distancias más remotas y hagan permanente el imperio de Inglaterra sobre el comercio”.

Los países liberados tienen gratitud a Bolívar, el propio Olmedo, amenazado y vejado por Bolívar, le dedicó un canto; Rocafuerte también expresó su admiración. Creo que lo hacían al Bolívar militar.

 

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3 comentarios

  1. Asco de persona ese Bolivar
    Creo que nos hubiera ido mejor solos (con Cuenca, Loja, El Oro y Los Rios), o yendonos con el Peru, que teniamos mas afinidad que con Quito, Colombia o Venezuela.
    ¿Que opina Ud?

  2. Formar parte de Gran Colombia no fue la mejor opción, representó un enorme perjuicio económico. Lo ideal hubiera sido seguir independiente, lamentablemente Guayaquil no tenía experiencia militar y eran años en que los grandes se comían a los chicos. Francisco Roca, prócer, escribió un ensayo sobre las alternativas que Guayaquil tenía. Es buen análisis. A continuación el link: https://archive.org/details/elamigodelpasens00roca/page/n4

    1. Dr Arosemena, me podria indicar las fechas de aquellas cartas que Rocafuerte se expreso fuertemente contra los anhelos vitalicios de Bolivar. Solo pude encontrar la del 27 de septiembre del 27.

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