19 abril, 2024

Fuera los mañosos

Tenemos que ser pragmáticos y cuestionarnos si el plan económico presentado por el Gobierno días atrás, va a provocar la transformación económica de nuestro país; si con estas medidas lograremos abrir el Ecuador al mundo; si al aplicarlas estaremos enviando al mundo entero señales claras de transparencia, con un sistema judicial independiente y objetivo; si es que con estos ajustes se han definido reglas claras para la inversión extranjera o si al final gran parte de lo que hemos escuchado es un poco de lo que tradicionalmente y sin resultados efectivos, han hecho las autoridades de cada gobierno de turno.

Tienen la manía de amurallar al país y de pretender encerrarlo con medidas proteccionistas que van en detrimento de la competitividad y de mejoras sustanciales para el mercado ecuatoriano.

Se necesitan incentivos de largo plazo y suficientemente atractivos para convencer a los inversionistas extranjeros y nacionales de traer recursos al Ecuador para anclar sus inversiones de largo plazo. Esto se logra con seguridad y estabilidad. Si cada cierto tiempo se buscan paños de agua tibia y parches temporales, implementando medidas económicas coyunturales y reactivas, ahuyentarán todo tipo de inversión.

Por otro lado, siguen saliendo a la luz pública hechos de corrupción perpetrados por altos funcionarios del gobierno anterior que, para mala cosa del actual régimen, continuaban ostentando importantes cargos en este. Ya lo mencionaba en un artículo anterior, este gobierno debe espulgarse de todas esas sombras del régimen de la década perdida, porque al parecer, algunos son mañosos y traen o tienen alguna fechoría escondida, y de mantenerlos en funciones, el Gobierno proyectará una imagen de complicidad innecesaria.

El presidente de la República debe llenarse de los mejores elementos para la administración del país. La reestructuración nacional no puede esperar un día más; es imperativo tomar acciones claras y firmes al respecto. Se debe honrar el voto mayoritario de los ecuatorianos, para con liderazgo y personalidad llevar al país al sitial que se merece.

Artículos relacionados

El odio y la paz

En estos doce días de dolor un sólo hombre con todo su odio destruyó una sociedad entera, todo un país cayó por el odio de Correa: nos enfrentamos unos a otros, devastación. […]

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

×