23 abril, 2024

¿Qué celebran?

BUENA PREGUNTA. Los VERDE FLEX que están en la argolla, así como su líder festejan los 9 años del nacimiento del nuevo país. El que se dice fundaron a partir de la Constitución de Montecristi, mamotreto que está siendo enmendado a troche y moche para adaptarlo a sus conveniencias. Antes que ellos nada, después de ellos todo.

En nueve años se han gastado lo que ningún gobierno desde la era republicana logro hacer. No se conoce la cifra exacta que se han farreado sin control ni fiscalización alguna; mucha de la información es un secreto de estado. Las reservas que se tenían, incluido el oro físico, marcho para la construcción de carreteras, hospitales, escuelas y más obras, algunas inútiles; ejemplo al despilfarro es la refinería del Pacifico donde están enterrados millones.

El país está endeudado hasta la coronilla, se les debe a las once mil vírgenes. Chinos, petroleras, municipios, contratistas, proveedores y burocracia, hacen cola para tratar de cobrar. Nos acercamos rápidamente a un escenario como el venezolano. La viada impide aun al pueblo visualizar la realidad económica a la que se verá abocado en los próximos meses.

Peroratas, canturrias desentonadas y bailoteos que se presentaran el sábado 16 de enero en los Samanes, buscan persuadir y ocultar la real verdad de lo que ha sido el multimillonario gasto en los 9 años del gobierno correista. La difusión de los medios incautados y otros comprados irresponsablemente, será a rabiar. Todo a lo grande en un nuevo alarde de derroche.

Continúan con el cuento de echar la culpa al pasado. ¿Hasta cuándo? Se invoca y se llama a los jóvenes a que no se dejen embaucar ni abusar de quienes fueron los acusantes de la crisis de los 90 y la debacle financiera de fines de siglo. No se dan cuenta que ellos ya constituyen el peor pasado de este siglo. Prohibido olvidar

Las inauguraciones están a la orden del día y con la mayor irresponsabilidad se anuncian nuevas tomando los fondos de instituciones como IESS. La campaña para las próximas elecciones se inició y se hará proselitismo ante la mirada complaciente del Consejo Electoral.

Las sabatinas cambiaron de formato. Se las está sustituyendo por la agresión a todo aquello que se considere oposición. Los medios continúan siendo los predilectos, pero ahora se añade el desprestigio, insultos y calumnias a las personas por el solo hecho de plantear soluciones a la crisis económica.

No se escucha como antes la insistencia del cambio de la Matriz Productiva. Parece que las propuestas de inversionistas extranjeros de construir infraestructuras millonarias se quedaron en ofrecimientos. No hay confianza y el riesgo país sigue subiendo.

El incremento de las tarifas eléctricas a los sectores industriales y comerciales, no van de la mano con la entrada en funcionamiento de las centrales hidroeléctricas. Aumentarán los costos de producción, los que serán trasladados al consumidor. Las cocinas de inducción difícilmente serán adquiridas si las planillas eléctricas suben. En la costa el calor por el invierno y la influencia del Niño es un agravante.

La farra va, porque va. Nuestro pueblo asistirá a un espectáculo gratuito más que nada porque esta chiro. Los efectos de las crisis se irán sintiendo y lo dilapidado conociendo.

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Recolectar firmas para "Cambiar el acta" ¿?

Porque según versión de la Sra. Ministra de patrimonio, vocera del Señor Presidente (hoy se lo escuché a él en su informe sabatino 14-1-12)“Eloy Alfaro no fue asesinado por el pueblo quiteño sino por “las oligarquias” azuzadas a través de su mayor instrumento que fueron en ese momento, los medios de comunicación”…¿?(solo falta-corruptos-)

¡Qué absurdo! ¡Si! Porque marchar contra la historia es un absurdo. Y sobre la muerte de Alfaro-un sacrilegio-

¡Señor Presidente!. No deje que profanen la memoria de este hombre legendario. Menos aún, ponerlo en la picota de la vindicta pública, recogiendo firmas: quién sabe cuántos lo harán, como lo que vimos en las tomas de recibimiento que le dieron al Presidente Iraní-(hombres del pueblo” como Ud. llama a un solo sector de los habitantes), ovacionándole y con banderitas en mano, muy sonrientes; creo, sin siquiera saber quien era ese hombre(¿?)

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