18 abril, 2024

La descomunal lucha de Macri contra HIDRA

HIDRA: “Hija de Tifón y de Equidna, la hidra era un terrible dragón policéfalo que vivía en los pantanos de Lerna, capaz de matar con su ponzoñoso aliento todo aquello que estuviera alrededor.

De las nueve cabezas que poseía, la del centro era inmortal, y si se le cortaba una de éstas, aparecían dos en su lugar. Aunque Heracles en su segundo trabajo dio muerte al monstruo mediante una estratagema, consistente en cauterizar cada herida del cuello para que las cabezas no pudiesen volver a rebrotar, la hidra sobrevivió en los bestiarios medievales, aunque perdió el nombre propio y quedó simplemente como un dragón policéfalo.

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El ingeniero Mauricio Macri, presidente electo de Argentina, luchó con una honda contra la Hidra del Kirscherismo, Cristina Fernandez, y la corrupción que por décadas ha venido diezmando al ciudadano argentino.

Luego del reconocido fracaso del sistema comunista, auspiciador del irresponsable y amoral que no desea trabajar, pero si vivir del que lo hace, deciden reinventar la izquierda.

Ciertos factores institucionales se repitieron en Sudamérica para permitir cabeceos tales como el paso de una situación de inestabilidad presidencial, a la emergencia de liderazgos personalistas que hacen de las debilidades asociativas y del sistema de partidos su fuente de poder, un avasallamiento de los derechos y libertades de la población.

Estas democracias (que “basan en la premisa de que quienquiera que gane las elecciones presidenciales tiene el derecho a gobernar como le de su “soberana” gana, sin balances de poder”), menosprecian las aspiraciones democráticas o inclusivas y son el caldo de cultivo ideal para esquemas restrictivos y violadores de derechos.

Los resortes del poder son manejados por la esfera que rodea al Presidente, persona que se endiosa y asume las directrices y juzgamientos, alimentado con la mediatización de la política.

En el siglo XX ese diseño institucional y de la división “republicana” de poderes fue puesto a prueba, las consecuencias no fueron buenas.

Las “soluciones” autoritarias implementadas desde los sectores de poder y la participación política se fue tornando en un aspecto de especial relevancia. Tanto por su ausencia, con la complicidad social de atropellos a los derechos civiles, como en su forma más radicalizada y determinada del Pueblo que se leía a sí mismo y leía la historia.

El Pueblo se tornó protagonista de todos los discursos, de cualquier ala política, volviendolo un concepto vacío y víctima de reinterpretación.

La militancia llevó hasta las últimas consecuencias los ideales revolucionarios sin cambiar instituciones obsoletas o ineficientes que respondieron con represión de la forma más violenta.

La simple participación política, atribución libre que en las jóvenes democracias había llevado años conseguir, fue convertida rápidamente en un tabú y silenciada por quienes ilegalmente detentaban el poder.

Movimientos sociales fueron usados de estructuras partidarias para poder competir en elecciones. Vio a las elecciones fracasar, vio a los ejércitos tomar el poder e instaurar regímenes represivos. Vio a sectores populares erigirse como  representantes de las mayorías y minorías, y dejar de lado otras minorías por cuestiones ideológicas. Vio prácticas de tropas, ideas y modelos que fracasaron.

En la mayoría de los países se ha creado una fuerte división dentro de la sociedad, con niveles de conflicto y violencia que no son tolerables.

La violencia de la real desigualdad, son la regla diaria de un continente con abundancia de recursos naturales e histórica debilidad en la capacidad productiva y de gestión.

​​Empero hay una pregunta que no podemos responder es: ¿Qué es la identidad sudamericana?

Los que trabajan y buscan un mejor futuro, los que desean libertad, los que aman a su familia, tienen que respaldar a las ideas y metodologías propuestas por el ingeniero Mauricio Macri, desde ya.

Sudamericanos es deber tomar la escoba de la ideología de honestidad, prosperidad y libertad y barrer a los demás países mancillados por el mal del Siglo XXI.

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1 comentario

  1. HACE POCOS DÍAS EL PRESIDENTE MADURO, CON LA FINALIDAD DE ATIZAR EL ODIO DE LAS CLASES MENOS CULTAS DE CUMANÁ, DIJO QUE LE IBA A CAMBIAR EL NOMBRE DE CRISTOBAL COLÓN A UNA POBLACIÓN, POR QUE NO ES POSIBLE ENALTECER EL NOMBRE DE TODOS LOS QUE NOS ESCLAVIZARON.
    SE OLVIDA O DESCONOCE QUE NO HAY UN PUEBLO O ETNIA O IMPERIO QUE NO HAYA SIDO ARRASADO EN UN MOMENTO DE LA HISTORIA POR OTRO MAS FUERTE, SIN EMBARGO, ESTOS PUEBLOS DEJARON ATRÁS LOS ODIOS Y PUSIERON SU MIRADA EN EL FUTURO DE SUS HIJOS Y HOY SON PAÍSES DESARROLLADOS.

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