28 marzo, 2024

Dinero falsificado

Dinero falsificado es el dinero que se produce sin la conformidad legal del Estado o gobierno y que se parece o se asemeja a la moneda real, lo suficiente como para hacerse pasar por la original. La producción o el uso de dinero falsificado es una forma de fraude.

La falsificación de dinero es probablemente tan antigua como el propio dinero.

Actualmente algunos de los mejores billetes falsificados son denominados Supe dólares a causa de su elevada calidad, y semejanza a los billetes originales.

Entre los efectos perjudiciales de los billetes falsos destacan:
Una reducción del valor «real» del dinero, al incrementarse los precios debido a la inflación debido a que hay más dinero en circulación en la economía. Un descenso en la aceptabilidad del papel moneda. Pérdidas porque no reembolsan el dinero falsificado.

Tradicionalmente las técnicas anti falsificación vislumbran la inclusión de detalles y dispositivos en los billetes para dificultar la falsificación y hacer más fácil el detectar billetes falsos. Entre las características que se aplican son el uso de dibujos con filigranas muy finas, coloraciones especiales, uso de marcas de agua y elementos holográficos, entre otros.

El líder en papel moneda, virtualmente imposible de falsificar, es el Billete de Dólar Norteamericano; principalmente su última edición de 100 (Cien).

Se reproducen a continuación algunas técnicas para detectarlos:
Fluorescencia. Si se expone a luz ultravioleta, el papel no tiene fluorescencia. Es opaco porque se fabrica con algodón y lino. En cambio, la mayoría de los dólares falsos tienen acentuados niveles de fluorescencia.

Banda de seguridad. A partir de 1990 se agrega junto a la incorporación de micro letras una franja de poliéster a los billetes con la leyenda «USA». En el billete de u$s100 es roja y se encuentra a la izquierda de la figura de Franklin; u$s50 es blanca amarillenta y se ubica a la derecha (anverso), y en el de u$s20 es de color verde y está más hacia el borde izquierdo.

«Carteo». Si se toma al dólar de los extremos y se lo estira suavemente varias veces, el billete desprenderá un sonido característico llamado «carteo» y que es diferente si es falso.

Micro letra. Desde 1990 se agregó a los óvalos centrales de los billetes de u$s50 y u$s100 la inscripción «United States of America». Y aparece en los demás billetes bordeando diversas zonas en las series desde 1996. Esta micro letra aparece «borrosa» en la mayoría de las falsificaciones.

Tacto. Los bordes del billete son rugosos, lo que lo hace áspero al tacto. Es producto de la impresión de huecograbado. No aparece en la mayoría de los falsos.

Tinta. Su composición es secreto de Estado que ningún falsario pudo imitar. Una prueba de autenticidad es frotar el lado verde sobre una hoja en blanco. El bueno destiñe una coloración verde.

Filigranas II. El borde del frente y dorso de los billetes está enmarcado por tramados o filigranas. Las falsas se empastan o esfuman. Las verdaderas son perfectamente visibles, no son borrosas y su trazo es perfecto.

Fibrillas. Son los filamentos de seguridad. Se incorporan a la pasta de papel aún húmedas. Son hilos de seda o plástico, azules y rojos.

Impresión OVI. Es la impresión ópticamente variable. Está en la nueva serie de dólares. Al inclinar el billete, esta tinta cambia de color, del verde al negro. En el de u$s100 está abajo a la derecha.

Los «dientes de sierra» de los sellos de la Reserva Federal y del departamento del Tesoro deben ser claros y no tener ninguno roto.

En base a un estudio, un tanto empírico, hay una gran masa de Dinero Falso circulando; especialmente detectado entre los expendedores de lotería que recorren a píe. (Con el desconocimiento absoluto y total de la Junta de Beneficencia).

Me dirijo expresamente a las autoridades correspondientes a estar alerta.

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