25 abril, 2024

De Ripley, La vergüenza dicha en cuatro letras: IESS

A pesar de que me han enviado este documento con la finalidad de que lo reenvíe, vía internet, a través de las redes sociales, con la finalidad de hacer conocer a mis contactos sobre tamaña barbaridad. Más, por elemental ética, opté por borrar el nombre del paciente. Pero eso sí, dejando total evidencia de la perversa e irrespetuosa actitud de parte de quienes manejan y administran el sistema de atención médica a los afiliados por parte del tristemente célebre IESS.

Claramente se puede notar que a dicho paciente le están dando una cita para un simple electrocardiograma PARA EL AÑO 2020; es decir, PARA DESPUES DE 5 AÑOS!!!!!!!!!!! Y para colmo del irrespeto, le advierten “presentarse 15 minutos antes de la hora de la cita”

En verdad que; en este preciso momento, me molesta sobremanera tener que dedicar parte de mi valioso tiempo en comentar en detalles tan absurda y estúpida situación; pero solamente, y por el momento, quiero dejar muy en claro mi absoluto y enérgico rechazo a un sistema que; además de ser potencialmente corrupto, nos avergüenza, y ofende la inteligencia de los buenos ecuatorianos.

“SOLO BASTA EL SILENCIO DE LOS BUENOS….PARA QUE LOS MALOS TRIUNFEN

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7 comentarios

  1. La noche del 22 de diciembre del 2014 fui ingresado por emergencia a la Clínica Kennedy Alborada por una obstrucción intestinal casi total y el peligro inminente de una peritonitis. Al día siguiente cuando iba a intenter contactarme con el IESS por medio de un familiar, ya se puede imaginar que ambiente había en la institución. Opté por no seguir tratando y mi seguro privado me cubrió el «siniestro» (hemicolostomía y apendicetomía. Definitivamente el IESS solo sirve para ser la caja chica del gobierno de turno y éste (revolucionario) es uno más de la larga lista de vergonzosa administración. Gracias a Dios en la Kennedy no se ve lo que ocurre en el IESS. Expreso mi gratitude a esa casa de salud y sobre todo a los Dres. Jhon Cuenca Vega e Ivan Mendoza Dueñas, porque aplican el juramento de hipócrates y ejercen su profesión como si fuera un verdadero apostolado, yendo siempre más allá del deber. Los días que estuve internado (Dic 22 2014 a Ene 3 2015) Tuve 3 visitas/día.

  2. Una de las cosas que realmente más me molesta es la tamaña y afrentosa actitud a través de las cuales actúan ciertos infames que dicen llamarse médicos; lo que los convierte dentro de nuestro argot popular; a más de su delictiva conducta, en típicos ?caretucos?. Creen ser intocables, escudando su iracundia a través de un morboso y mal llamado espíritu de cuerpo. No sienten absolutamente ningún tipo de respeto para con sus pacientes; y destilan perversidad al tomar decisiones;dentro y fuera de un quirófano,debido a esa desgraciada ventaja que tienen sobre aquellos. Esto, pues, por el hecho simple de ser médicos. Por supuesto que no todos son iguales. Conozco y tengo el privilegio de contar con familiares y amigos dedicados a esta noble profesión, mismos que además no se permiten la más mínima oportunidad de contaminarse. Guardo celosamente la esperanza de que con el tiempo, aquellos pelafustanes, sean fulminados con la aplicación de los contenidos del actual Código Orgánico Integral

  3. Recibí esta información a través de mi correo hace algún tiempo, sinceramente casi me ahogo de la risa, al pensar que el paciente no verificó los datos de la papeleta de cita medica para su examen, a penas la recibió, se trata obviamente de un error que hubiera sido subsanado de manera inmediata y listo. Noto que su análisis es cuántico y profundo.

    Cordialmente.

  4. Hola Dr. Valarezo:
    En todo caso, habría entonces que analizar el problema desde sus origenes, en tanto y en cuanto; y en este caso, aquello no constituye pues ninguna responsablidad del paciente por tener que verificar, o no, si en la papeleta que le otorgaron, existió o no un error. Lo que pasa es que desgraciadamente el sistema funciona asi, y ese es el verdadero problema. No olvidemos, por simple lógica, que el o los sistemas que ahí se aplican, son creados, manejados y ejecutados por, y a traves de la institución; y no por el o los pacientes. Por tanto, no veo que haya existido responsabilidad alguna por parte de aquel paciente. Por supuesto que mi análisis es cuántico y profundo, asi como obviamente es producto de resultados, además de miles de denuncias sobre la forma como se denigra día trás día a quienes; en verdad y a la postre, somos los verdaderos dueños de la institucion; esto es, SUS AFILIADOS….CONTINUA…..

  5. …..También por las tristes y lamentables experiencias personales por las que me he visto obligado a experimentar. De tal manera que, no está bien intentar siquiera tapar el sol con un solo dedo ante tanta desgracia. Más bien se debería hacer un profundo cuestionamiento general, y tratar de enmendar tanta miseria humana al interior del IESS (como institución), así como al interior de sus centros de salud.

    Mire usted, Doctor, suena por demás grotesco, por así decirlo, evidenciar que es el colmo de la audacia y la corrupción «lo que acaban de descubrir al interior del Tedoro Maldonado, y lo que supuestamente se cree es reciente».Lamentablemente sabemos que eso no es un delito de ahora….CONTINUA…..

  6. …..Constituye pues tamaña verguenza que el país y el mundo se enteren de la forma COMO SE ROBAN LA SALUD Y LA VIDA DE LOS AFILIADOS (los medicamentos del Hospital Teodoro Maldonado). Ojalá que por esta vez se empiece haciendo verdadera justicia.
    Aclaro que, por haber sido privilegiado por dos ocasiones dentro del Congreso Nacional, en calidad de Legislador electo por mi provincia, y/o en mi calidad de profesional del derecho, aquello no me induce a analizar u opinar del tema bajo ningún concepto político. Lo mío es exclusivamente bajo el esquema moral, humano, constitucional y legal.

    Quedo siempre a sus ordenes.

    Saludos,

    RAUL RAMIREZ ORELLANA

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