28 marzo, 2024

Contra la Apología de lo adjetivo…

Hace poco tiempo un llamado en la televisión pretendía, con cierto desparpajo, captar asistentes a una conferencia sobre marketing. ¿Con cierto desparpajo? Advertía, al menos, que oír al expositor significaba aprovechar, en cuanto a conocimiento, a “la mente más brillante del mundo”. ¿Lo mejor del pensamiento respecto a los 7.000 millones de habitantes del planeta tierra? Pero también existen los comentarios, y a veces planteados con seriedad crítica, que tal deportista es “el mejor de todos los tiempos”. Además que “ hacía mucho” que no estaba en el mercado una “obra literaria semejante”, hoy, por fin, en nuestras manos. Y, por supuesto, el típico anuncio politiquero eleccionario o justificativo del poder, “jamás antes de nuestro gobierno ningún otro ha realizado lo que está, definitivamente, haciendo grande al país”. Claro que en el escenario de los concursos de belleza la falta de respeto a las participantes perdedoras queda evidente, cuando el show man del evento anuncia que “la triunfadora, después de dura contienda , ha demostrado ser la más bella entre todas”. ¿Y en la ciencia? “Este descubrimiento es el más grande de todas las épocas. En la historia no hay nada registrado así”.

¿Exceso en el uso comunicacional de convertir lo cotidiano en extraordinario? Como que la fantasía y el ánimo de sorprender a los incautos cobran prioridad en la relación social del diario vivir. ¿Cómo no recordar, por ejemplo, cuando en las tan sentimentales fiestas de los 15 años, las “fiestas rosa”, quien presenta a la cumpleañera sólo atina a expresar vocablos superlativos, incluso incongruentes, ante la atónita concurrencia que impulsa, por reflejo condicionado, un torrente de aplausos… La generalización referente a individuos o sucesos implica, igualmente, una confrontación con la verdad de las cosas, convirtiendo la realidad en una mentira. Son famosos los proverbios, los aforismos, los refranes que pretenden sintetizar la vida en una sentencia, como que si cada humano existiere moldeado por un estándar de ser o querer ser… ¿Cuánto daño ha causado eso de que “a la mujer no le conviene ningún tipo de profundidad en el estudio”? Se lo decía en la Atenas clásica, permitió quemar a las mujeres pensantes calificadas de brujas en el medioevo y hoy, incluso, en algunos lugares, aun no es libre de adquirir su propia identidad, por sí misma.

Hay como una neurosis de por medio en esto de crear valor moral agregado sin mayor coherencia con la realidad. Las memorias y las autobiografías son un ejemplo clásico. César justificando su atraco ideológico a la política romana, con sus Comentarios de la Guerra de las Galias, para manipular el poder a su antojo… ¿Y las supervivencias catastróficas de Nostradamus, amo y señor de la verdad revelada…? No se quedan atrás las grabaciones jeroglíficas egipcias a favor del adolescente Tutankamon, que cuentan las grandes guerras que jamás confrontó… Los relatos circenses de los amoríos de Casanova son una joya en este sentido, por los desvíos libertarios al sesgar la vida a su antojo. Qué decir, más allá de la expresión literaria, del ejército miniatura en terracota del emperador chino Quin Shi Huang para entrar, lanza en ristre, a los cielos de sus antepasados una vez muerto… No es menos significativo, por supuesto, la figura paterna en las relaciones sociales, en la exaltación permanente de la inteligencia de sus hijos, en una práctica casi de veneración hacia sí mismo, en su “afán de reconocimiento” de reproductor de calidad… ¿Hinchazón sicopática del ego?.

Pero la publicidad mediática actual se lleva las palmas. Si un líquido ambiental es usado en una habitación, contagia, automáticamente, toda la casa y, además, el olor llena las viviendas vecinas y se toma las calles… Los automotores suben y bajan cuestas, sea cualquiera la dureza o suavidad de la superficie, a velocidades no permitidas en el tránsito normal… La mayoría de los gordos, incluso, extrapolan la propaganda de cómo adelgazar y viven, sicológicamente, una reducción de peso y talla ficticias promocionada en el contexto de “rebaje sin cirugía, sin dejar de comer, sin hacer ejercicios…”. Rara es la empresa que presenta su producto tal cual es, según sus características y ventajas de su contenido para el usuario. La confusión juega en el mercado como parte de la aventura del marketing. Todo sufre de gigantismo. La exageración triunfa día por día. Hasta la misma palabra adjetivo está perdiendo su razón de ser. La realidad no es más real, sino ficción. Ahora es necesario otros vocablos que generen la comprensión de la mentira en términos de cierto y verdadero. Ultra, mega, hiper, plus, supra son condicionantes de la nueva vida existente!

Artículos relacionados

Inversiones para el desarrollo de los pueblos

“Donde no hay ninguna visión, los pueblos perecen.” –, XXIX, 18–

Recordemos que las inversiones en los sectores de infraestructura (cuando son eficaces y eficientes) para el transporte de bienes y de personas son multiplicativas, es decir que luego el retorno de esa inversión se ve en dinero para el inversionista, en productos más económicos para todos los ciudadanos y en mayor trabajo y por ende menos pobreza; y deben ser compartidas entre el sector público y el privado y apoyadas por las universidades. Esto está pasando en Sudamérica en este momento.

Perú va a invertir $2,670 millones en proyectos de infraestructura vial, entre estos la modernización del tren eléctrico de Lima. El año anterior fue $1,850 millones. Colombia invertirá en el 2011 en proyectos de infraestructura $934 millones. Mucho de esto se va para el transporte público. Ciudad de México va a extender su Metrovía a un costo de $840 millones. Chile en la suya va a invertir $628 millones. Y Argentina lo propio con una inversión para la Metrovía de $444 millones. En Ecuador, en cambio, seguimos esperando el tren, que es tan necesario para nuestro desarrollo económico.

Despacito

Como dice la canción de actualidad, DESPACITO, es como se van revelando los datos de la gran corrupción en que está inmerso el país, toda vez que se conoce el baile de […]

3 comentarios

  1. ACTUALMENTE SE ASISTE A LAS UNIVERSIDADES PARA APRENDER A «CUENTEAR», PARA ESO CREO QUE ES EL «MARKETING» Y LA PUBLICIDAD Y LOS POLITICOS DE TODAS LAS NACIONES Y TENDENCIAS ESTAN APRENDIENDO MUY BIEN LA LECCION.

  2. Excelente mensaje para reflexionar mucho. Nos hemos dejado envolver en la farsa de la exageración propagandística, creando en las personas necesidades de cosas supérfluas o inalcanzables y produciendo con engaños frustraciones en quienes se dejan impresionar por lo que oyen y ven.
    Gracias.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

×