19 abril, 2024

Guayaquil está de Luto

El Lunes 15 de Diciembre del 2008, quedará gravado en la memoria de los guayaquileños como la fecha en que perdiera a su mas Preclaro hijo, defensor y luchador que haya tenido en los últimos 30 años. León Febres-Cordero, ex Presidente de la República y ex Alcalde de Guayaquil, fue sin lugar a dudas seguido y admirado por muchos, como creo animadversión para un numero reducido de sus detractores.

Desde que se conoció su delicado estado de salud y su ingreso a la Clínica Guayaquil, se percibió una sensación de angustia y de desconcierto que se manifestó con la visita masiva de amigos y seguidores a la casa de salud; gestos de agradecimiento y admiración hacia un hombre que entregó la mayor parte de su vida al servicio de la patria y de la ciudad se hicieron evidentes. Públicamente personajes con quienes había mantenido grandes diferencias depusieron actitudes mezquinas y en algunos casos hasta patrañeras, para reconocer el aporte que León había dado en su trayectoria política.

Tuve el privilegio de ser su colaborador cuando ejerció la Presidencia de la República de 1984-1988. Desde la Gerencia del Banco de la Vivienda me toco llevar adelante en conjunto con el entonces Gobernador, Jaime Nebot y el Presidente de la Junta y Banco de la Vivienda, Sixto Duran-Ballén, uno de sus principales objetivos o postulados, el dar la mayor cantidad de viviendas (Techo) a los ecuatorianos. El programa de vivienda, unido a la búsqueda de mejoras económicas y de proporcionar plazas de trabajo a nuestro pueblo, se convirtieron para León casi en una obsesión que vio solo truncada momentáneamente por las fuerzas de la naturaleza. (1987-Sismo-Ruptura del Oleoducto de Petróleo).

Cuando le toco desempeñar la Alcaldía de Guayaquil con el amplio respaldo de todos sus habitantes, se dio inicio a aquel proceso de transformación que tuvo como factor preponderante el amor por la ciudad y sus Instituciones, logrando calar profundamente en el sentimiento del guayaquileño. Desde 1992 hasta el 2000, la administración Febrescorderista logró aquel cambio que todos deseábamos luego de que habíamos caído como ciudad a los niveles mas bajos de la degradación y la inmundicia.

En el año 1993, mientras ejercí la Primera Jefatura del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, se logró con el apoyo del Alcalde León Febres-Cordero, la firma de un Convenio mediante el cual la M.I. Municipalidad de Guayaquil ejecutaría la recaudación del Impuesto que sobre los Predios Urbanos percibe el Cuerpo de Bomberos. Gracias a este Convenio y a la voluntad de León, la Benemérita Institución entró en un proceso de transformación y modernización que en lo posterior ha sido igualmente respaldado por su sucesor, el Ab. Jaime Nebot S.

GUAYAQUIL ESTA DE LUTO. No así para quienes son sus enemigos. Ha perdido al guerrero que por muchos años la defendió y lucho por su Autonomía aun no lograda. La figura de León y su personalidad trascenderán en el tiempo.

“QUIZAS MUCHOS OJOS NO PUDIERON VERLO, MAS NINGUNO PODRA NO LLORARLO

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Cambiar la estrategia

Estamos gritando frente al mar sin recibir ni un eco de respuesta. Estamos gritando frente al mar a un barco lejano que pasa por el horizonte; a una gaviota que no detiene su vuelo; a una ola que no afecta su ritmo. Somos un coro de independientes y autonómicos que pretendemos llegar a solistas, a ratos pasando por pacatos. Somos, en fin, parias políticos que sin un andar acompasado y sin dirección claramente marcada intentamos llevar una plástica banderita de protesta hasta los sordos oídos de quienes nos estropean cada día y desde hace un año.

Este constante jorobar al que nos tienen sometidos nos hace reaccionar. Cada uno a su modo intenta protestar por las patadas recibidas en partes pudendas, por los puñetazos en el rostro, por las descorazonadoras formas de “hacer País”. Cada guayaquileño es su propio grupo de “a uno”. Nos disparan desde todos los ángulos y la reacción, nuestra reacción, sigue siendo la misma. Arribamos a una natural conclusión: Vociferar no sirve para nada. Vociferar “in situ” es inútil es marchar en el propio terreno…

No hay comentarios

  1. «A Dios lo que es de Dios, al Cesar lo que es del Cesar»… A LEON FEBRES CORDERO RIBADENEYRA, la gloria inalienable de haber salvado a Guayaquil de las garras de los piratas del siglo XX.
    Paz en la tumba del LEON DE GUAYAQUIL!

  2. Si Señores,

    Aún siendo serrano, de Ibarra, Imbabura, pude conocer de su trabajo, pues con todo lo controversial que fue, con sus errores y aciertos, utilizó aquello, para ayuda del País y no para su persona.

    Dándole esa imagen que aún sus adversarios sabían reconocer, … La de un hombre que lucho por sus ideas en beneficio de los demás.

    Conocí Guayaquil, antes durante y después de la regeneración, … Eso basta para decir que aún las piedras hablarán por muchos años de su trabajo y su legado… Me alegro que su ciudad haya demostrado su agradecimento.

    A.R.

  3. León Febres Cordero siempre estara en nuestros corazones como hombre de lucha,carácter y buen guayaco, que todos nos miremos en el espejo de un hombre en los buenos ejemplos. gracias

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