19 abril, 2024

Obama 2008

Hoy me alejo del escándalo infructuoso que resulta ser nuestra política. Los debates que versan sobre el buen vivir, las pachas mamas, el quechua (lenguaje que no tiene cómo escribirse) como idioma oficial y otros temas de igual poca monta, son debates vacuos, pérdida de tiempo hasta criminal en un país como el Ecuador donde todo está por hacerse y la población espera soluciones reales y prácticas a los problemas cotidianos.

Alejado como en efecto solo por hoy me alejo de ese bullicio, insisto, inútil debate ecuatoriano, he seguido la Convención del Partido Demócrata en Estados Unidos de América por televisión toda esta semana. Es impresionante ver cómo ante tanto desbarajuste político, económico y moral, la Unión americana se está reinventando en este proceso electoral. El peso de ese país no lo amilana ni lo enlentece; lo dinamiza a buscar una solución. No escogen los demócratas a una mujer que ya se paseó por los salones de la Casa Blanca y estrechó manos de cientos de líderes mundiales. No. Los demócratas apuestan por un cambio completamente diferente.

En una lección de madurez política, Hillary Rodman Clinton cede su espacio en las elecciones primarias de su partido ante la avalancha de adhesiones que recibe un perfecto desconocido en la política americana. Un sujeto cuyo nombre hace 4 años era casi impronunciable, generando rechazo por su calidad de don nadie y por ende falto de experiencia. Pero ayer, en un sonado, y excelente discurso donde conjugó pragmatismo y retórica, Barack Hussein Obama Jr. aceptó la nominación demócrata para correr en campaña rumbo a la oficina oval de la Casa Blanca. El evento de ayer en la tarde y noche de Denver, Colorado, fue apoteósico. Ya no es un nuevo Kennedy (ni John y Robert) el que se echa a hombro a un Partido Demócrata que anhela demostrar que otra América es posible. Hoy es un político nuevo que se ha ganado el derecho de dejar su propia impronta en la histórica política de EUA.

El discurso agradó a muchos. Se toparon con realismo y positivismo temas como la búsqueda de energía no contaminante y la adicción al petróleo; soluciones a los problemas de salud pública americana y un sistema de seguridad social que te protege solo cuando estás sano (como lo dijera una honesta mujer de Carolina del Norte); reconstruir viejas alianzas políticas internacionales con los amigos de antes, enemigos ahora; un Estado que trabaje para sus ciudadanos y no contra sus ciudadanos; terminar con la política de guerra preventiva en Iraq cosa que estruja las tropas americanas enviándolas a rotundos fracasos militares. Y finalmente la confirmación de que el sueño americano existe en un marco de libertades que desde 1776 se respetan y condensan en la Declaración de Independencia y la Constitución de los Estados Unidos de América.

El senador Obama no necesita suerte; debe trabajar duro para luchar contra su único rival: el factor racial en América, que sigue siendo un muro que está allí aunque nadie lo mencione con todas sus letras. ¡Adelante senador Obama! ¡Vaya con decisión al gran debate con su rival de carne y hueso! Desnude las flaquezas de su oponente y sienta como su ciudadanía lo respalda. Una vez Obama sentado en la Casa Blanca muchos aprendices de dictador en América del Sur se quedarán sin piso ni discurso… Cuidado y nuestro aprendiz se queda sin “imperio yanqui” como predilecto cuco.

¿Me pregunto si Rafael Correa Delgado y sus compañeritos por el SÍ habrán visto este acontecimiento histórico en la política no de Occidente sino mundial? No lo vio. Andaba en Salitre repartiendo bonos en dinero, sacos de urea china barata y sonrisas para su tan ansiado SÍ. Si el Ecuador ganara dinero con las campañas electorales que aquí se desarrollan cada vez y cuando, seríamos un enorme país de economía boyante y una población realmente libre con acceso a servicios y obra pública de calidad. Lástima para los ecuatorianos que languidecemos más en estas épocas de revolución electoral sin oír debates de contenidos sobre cómo solucionar los grandes problemas nacionales.

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  1. ALGUNA VEZ LEI EN UN LIBRO DEL CUESTIONADO RONALD HUBBARD, ALGO QUE SI ME HACE PENSAR BASTANTE Y LARGO: «LA RISA SIN MOTIVO ES PROPIEDAD DE LOS IDIOTAS», HABRA LEIDO AQUELLO SU «MAJESTAD»?.Y SINCERAMENTE ME PREOCUPA TENER QUE AGUANTAR LAS SONRISAS DEL IDIOTA DE CARONDELET A CADA MOMENTO EN SUS CANSINAS CADENAS RADIALES Y TELEVISIVAS, SEGUN LOS ENTENDIDOS… ES CONTAGIOSA, CUIDADO… ECUATORIANOS, CUIDADO….

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